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¿Ahora qué sigue?

Por Mario Javier Sánchez de la Torre


Después del fracaso, que se veía venir y que fue, el que pudo ser un interesante e importante ejercicio para fortalecer la incipiente democracia que se vive en este país, denominado Revocación de Mandato, la pregunta es: ¿Y ahora que sigue?


Por una parte como lo había dado a conocer en su agenda para el presente año Andrés Manuel López Obrador (AMLO), el hacer llegar al Congreso de la Unión sus iniciativas para la reforma electoral y también la que incorporará a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), a la cuestionada Guardia Nacional.


Obviamente anuncio que hizo desde el año pasado, cuando se supone no imaginaba el revés o derrota que sufriría su administración federal, al intentar imponer su retrograda contra reforma eléctrica, por parte de una oposición que se estrena como tal y que le muestra como puede que sea su gobierno de ahora en adelante.


Pero como respuesta a lo citado, cual ha sido la actitud tanto de AMLO, como de sus fieles servidores públicos, ante esta Nación. La forma de actuar tanto del fundador del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), como de sus incondicionales colaboradores, errónea.


¿Por qué errónea? Por una muy sencilla razón. La política es el arte de llegar a cuerdos a través del diálogo y no de la confrontación, porque por medio de esta última, simplemente nunca se logrará. Y la actitud del Ejecutivo Federal, todos los días desde su desprestigiada llamada “mañanera”, que no es otra cosa que el intento de una conferencia de prensa, como se dice en el medio “a modo”, en lugar de conciliar, agudiza cada día más las diferencias entre los sectores de todos los mexicanos, situación que ya se le está revirtiendo a estas alturas en lugar de estarle funcionando, como pudo llegar a ser al principio, cuando la población mexicana, aún creía lo que expresaba.


Polarización que aumentó en forma contundente a partir del resultado de la Revocación de Mandato, pues aunque los integrantes de Morena digan que fue un éxito, la realidad es que no, simplemente por los resultados obtenidos, de solo haber logrado la participación de aproximadamente un poco más de 17 millones de personas, si es que todas la boletas contabilizadas son reales, lo que representa la perdida para AMLO del 50 % de quienes lo apoyaron en el 2018. Situación a la que hay que sumar la derrota sufrida por el grupo legislativo de Morena y sus partidos aliados con relación a la contra reforma eléctrica hace solamente unos días, en el Congreso de la Unión.


Además de lo citado, todo indica que no todas las cosas le están saliendo bien al Presidente, pues las obras insignia de la administración no están funcionando como debieran, la que está aparentemente concluida y las que están en proceso, tienen problemas de costos y de aceptación.Y en el aspecto político también no todo anda como él quisiera, solamente hay que analizar la situación de Claudia en la Ciudad de México (CDMX) y lo que será la última prueba de fuego para su administración, la elección en puerta en 6 entidades federativas. Para conocer el posible futuro de Morena, solo queda esperar y no mucho tiempo. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes. [email protected] (Fech. Púb. Lun. 2-mayo-22)