En el marco de la reciente reunión de alto nivel en materia de seguridad y migración celebrada en Washington, la canciller de México, Alicia Bárcena, compartió detalles cruciales sobre las discusiones y acuerdos alcanzados durante la conferencia presidencial. En este encuentro, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, alertó a la delegación estadounidense acerca del preocupante tráfico de armas de uso exclusivo del ejército de Estados Unidos hacia México, fenómeno que se ha venido produciendo a través de la frontera norte.
Entre los aspectos más destacados de los acuerdos, Bárcena resaltó la coincidencia entre México y Estados Unidos respecto a la complejidad del fenómeno migratorio, reconociendo que este trasciende las fronteras de ambas naciones. Por ende, se acordó la necesidad de involucrar a otros países, especialmente aquellos de Centro y Sudamérica, ya que la mayoría de los migrantes provienen de estas regiones. Se enfatizó también la importancia de homologar las cifras migratorias para una mejor coordinación.
Otro punto relevante en los acuerdos fue la programación de una reunión a nivel ministerial con Guatemala con el propósito de coordinar acciones en la región y abordar conjuntamente los desafíos migratorios. Además, se anunció que Estados Unidos implementará sanciones a empresas aéreas y camioneras involucradas en el transporte de migrantes, y México se comprometió a tomar medidas similares, citando a los directivos de dichas empresas para rendir cuentas.
En el ámbito logístico, México planteó la necesidad de acelerar las obras en la mesa de alta y mejorar la eficiencia en los cruces fronterizos. Asimismo, se solicitó a las autoridades estadounidenses que la plataforma para solicitudes formales de migración ordenada no se limite a la Ciudad de México, sino que se extienda hacia el sur, facilitando así el proceso desde los países de origen de los migrantes.
En resumen, la reunión reflejó un esfuerzo conjunto para abordar los desafíos migratorios, promover la cooperación regional y tomar medidas concretas para frenar el tráfico ilícito de armas y garantizar una migración más ordenada y segura en la región.