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Tensión y desafíos: El INEGI admite pagos a cárteles para realizar censos en México

El INEGI pagó a cárteles para poder llevar a cabo censos en ciertas ciudades durante el año pasado, según lo reveló la directora adjunta de Censos Económicos y Agropecuarios del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Susana Pérez. La funcionaria señaló que se utilizaron diversas estrategias para lograr el acceso a estas áreas, y en algunos casos, fue necesario realizar pagos a los cárteles para obtener la autorización y garantizar la seguridad de los encuestadores y el personal del instituto.

Es importante destacar que los pagos realizados a los cárteles fueron de montos relativamente pequeños, pero esta situación plantea una preocupación significativa. Los analistas han observado que los cárteles de la droga están cada vez más enfocados en los trabajadores del INEGI, así como en empresas encuestadoras e investigadores de mercadotecnia en varias regiones de México.

La razón detrás de esta atención por parte de los cárteles podría ser variada. Por un lado, el acceso a información demográfica y económica valiosa que recopila el INEGI podría ser de interés para las actividades ilícitas de estos grupos criminales. Además, la presencia de los encuestadores en áreas controladas por los cárteles puede ser vista como una oportunidad para extorsionar, obtener información estratégica o incluso reclutar personal. Esta situación representa un desafío significativo para el INEGI, ya que deben encontrar formas de llevar a cabo su importante labor de recopilación de datos y censos de manera segura y efectiva, sin comprometer la integridad de su personal o la calidad de la información recopilada.

La admisión del INEGI sobre los pagos a cárteles ha puesto de manifiesto la complejidad y los riesgos que enfrentan las instituciones gubernamentales y los investigadores al operar en áreas donde el crimen organizado tiene un fuerte control. Es fundamental abordar este problema de manera responsable y buscar soluciones que protejan la integridad de los datos y la seguridad de los trabajadores involucrados en estas importantes tareas de recopilación de información.