El martes pasado, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), hizo una seria acusación en su conferencia matutina. Afirmó que sus adversarios políticos han puesto en marcha una “campaña sucia” en su contra, que considera irresponsable, perversa y de malas intenciones. Según AMLO, esta campaña busca desacreditarlo y difamarlo mediante la propagación de rumores y falsedades.
Lo que más preocupa al presidente es la grave insinuación que se está difundiendo: se está esparciendo la idea de que si llega a ocurrir una agresión hacia algún periodista o a un aspirante a la candidatura presidencial, él será el responsable. AMLO considera que esta acusación es extremadamente peligrosa y no tiene fundamento alguno.
Durante la conferencia, AMLO hizo un llamado a la reflexión a sus adversarios políticos, pidiéndoles que recapaciten sobre sus acciones y se abstengan de proceder de manera vil. Él enfatizó que su gobierno no necesita ni tiene intención de reprimir a nadie, ya que cuentan con el amplio apoyo del pueblo. Afirmó que su gobierno se rige por la doctrina del amor al prójimo y que, desde que asumió la presidencia, no ha ordenado la represión de ninguna persona o grupo.
El presidente de México mostró su preocupación por la naturaleza reciente y premeditada de esta “campaña perversa”. Aunque no hizo referencia a nombres específicos ni proporcionó detalles sobre quienes están detrás de ella, mencionó que en los próximos días presentarán un informe con detalles sobre quiénes han sido los responsables y cómo ha sido difundida esta campaña en su contra.
En sus declaraciones, AMLO también expresó su percepción de que esta campaña tiene como objetivo desestabilizar al país y afectar la imagen de su gobierno. Condenó la malicia detrás de estos actos y pidió a sus adversarios que detengan esta estrategia, ya que considera que va en contra de la estabilidad y el bienestar de México.
El presidente de México concluyó su intervención esperando que sus adversarios reconsideren sus acciones y eviten participar en esta campaña difamatoria. También dejó claro que seguirá adelante con su gobierno, enfocado en el bienestar del pueblo mexicano y manteniendo su compromiso con la democracia y el respeto a la libertad de expresión.