Cuando el equilibrio nos falla, solemos notarlo. Puedes sentirte mareado, aturdido o con náuseas. Percibes cierta inestabilidad mientras estás de pie y caminas, lo que puede hacerte caer. La habitación puede parecer que está girando o puedes tener esa sensación de que estás en caída libre, incluso estando sentado o acostado.
“El desequilibrio puede ocurrir por muchas situaciones”, dice el Dr. Kenny Lin, otorrinolaringólogo del Hospital Houston Methodist, especializado en problemas del oído interno asociados a trastornos del equilibrio. “Algunos de estos problemas son más preocupantes que otros, pero es importante saber cuándo estamos ante una condición subyacente que necesite tratamiento”.
Tener un mareo de vez en cuando no es necesariamente preocupante. A veces la causa es simple: ponerse de pie muy rápido.
“Pero si darse la vuelta en la cama te hace sentir como si estuvieras dando volteretas o si tienes episodios de mareos severos que duran varias horas, debes buscar evaluación médica “, agrega el Dr. Lin.
¿Qué causa los problemas de equilibrio?
“Esto puede ser difícil de precisar muchas veces, ya que el desequilibrio puede ser el resultado de diferentes factores”, explica el Dr. Lin.
Los problemas de equilibrio se derivan principalmente de problemas con:
• Oído interno
• Ojos
• Control musculoesquelético
• Circulación
• Cerebro
El vértigo es un subconjunto de mareos que causa la sensación de que todo gira, incluso estando estáticos. La causa más común de vértigo es un problema particular dentro del oído interno llamado vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), que a veces se conoce como cristales en el oído.
“El VPPB ocurre cuando los cristales adheridos a las paredes del oído interno, que ayudan a detectar cambios en la gravedad, se rompen y flotan”, explica el Dr. Lin. “Si un cristal flota en la parte equivocada del oído interno, desencadena una sensación exagerada de volteretas o giros”.
Otros problemas del oído interno que pueden conducir a problemas de equilibrio incluyen infecciones virales del oído, también llamadas laberintitis; y cambios en la presión del líquido dentro del oído, llamada enfermedad de Ménière. Ambas son menos comunes que el VPPB.
“Los problemas de equilibrio relacionados con la pérdida de control muscular son más comunes en adultos mayores o después de un reemplazo articular. Y es porque los reflejos pueden no ser tan rápidos como solían ser o los músculos y las articulaciones pueden no ser tan fuertes como solían ser”, dice el Dr. Lin. “Con respecto al impacto de la visión por el desequilibrio, simplemente pensemos en lo difícil que es caminar con los ojos cerrados, para comprender intuitivamente cómo los problemas con la vista pueden conducir al desequilibrio”.
El ejemplo clásico de cómo la circulación sanguínea puede afectar el equilibrio es la hipertensión ortostática, cuando se produce una caída temporal de la presión arterial después de ponerse de pie rápidamente. Esto puede hacer que te sientas mareado por un par de segundos. Y una conmoción cerebral es un ejemplo de cómo una lesión cerebral leve puede provocar problemas de equilibrio.
“A medida que el cerebro se recupera de una conmoción cerebral, la persona se siente mareada, con náuseas”, agrega el especialista del Hospital Houston Methodist. “Eso es porque el cerebro tiene problemas para asimilar y reaccionar ante lo que esté sucediendo alrededor”.
A veces, la causa de un problema de equilibrio no se puede precisar. El Dr. Lin, consciente de la naturaleza insatisfactoria de tales diagnósticos, se refiere a estos casos como pertenecientes a la categoría “nebulosa” de los trastornos del equilibrio.
¿Cómo sabes si tienes un trastorno del equilibrio?
Algunos eventos de desequilibrio son de corta duración, resolviéndose rápidamente por sí solos.
Pero debes buscar atención médica si el desequilibrio no es una sensación fugaz, si es debilitante e interrumpe tu vida o si está poniendo en riesgo tu seguridad.
Los signos de que podrías tener un trastorno del equilibrio incluyen:
• Mareos prolongados o extremos
• Una sensación de giro cuando en realidad no te estás moviendo (vértigo)
• Virar de lado a lado mientras caminas
• Caerse o sentir que te vas a caer
• Sensibilidad al movimiento
• Visión borrosa
• Desorientación
“Con tantos desencadenantes para el desequilibrio, es difícil para las personas saber cómo empezar”, añade el Dr. Lin. “Pueden ir a ver a su médico de atención primaria y luego ser enviados a un cardiólogo o neurólogo. Si se describen síntomas de vértigo, uno de estos especialistas podría sospechar un problema del oído interno y referir al paciente a un otorrinolaringólogo”.
En cuanto a los problemas del oído interno, el VPPB es fácil de diagnosticar en el consultorio de un médico.
“Hay una maniobra en la que, si te acuestas de lado y giras la cabeza, puedo observar tus ojos y ver si responden con un movimiento de salto y torsión llamado nistagmo”, explica el Dr. Lin. “Este es un signo de VPPB. Me dice que los oídos internos están sintiendo movimiento y desencadenando un reflejo en el que los ojos giran mientras intentan descubrir dónde está tu cuerpo”.
En algunos casos, la prueba vestibular puede ser necesaria para determinar si un trastorno del equilibrio tiene sus raíces en un problema del oído interno.
“El test vestibular es una serie de pruebas que evalúan qué tan bien están funcionando los órganos del equilibrio en el oído interno”, dice el Dr. Lin. “Esencialmente brinda más información y ayuda a formular un diagnóstico más preciso”.
Esta prueba también puede desempeñar un papel importante para descartar un problema del oído interno.
“Si las pruebas vestibulares son normales, sé que los oídos internos están funcionando como deberían y ese problema probablemente sea causado por uno de los otros factores ya mencionados”, aclara el especialista del Hospital Houston Methodist. “Aunque no estoy haciendo un diagnóstico, aclaro más la posible causa de desequilibrio. Podemos entonces descartar los oídos de la lista, reduciendo las posibilidades”.
Otras pruebas, como de imagenología y análisis de sangre, pueden ser necesarias en estos casos.
¿Cuál es el mejor tratamiento para los problemas de equilibrio?
El tratamiento de trastornos del equilibrio varía según la causa del problema.
“El VPPB es uno de los problemas de equilibrio más fáciles de tratar”, dice el Dr. Lin. “Hay maniobras que puede realizar, como la de Epley, que ayuda a mover los cristales hacia atrás donde pertenecen y donde no afectarán la sensación de equilibrio. Esto se puede realizar en el consultorio de un médico o con un fisioterapeuta”.
A veces, la maniobra de Epley funciona para resolver el vértigo de inmediato. A veces, es posible que sea necesario repetir la maniobra varias veces.
“Si se trata de una infección del oído interno, podemos recetar esteroides para ayudar a reducir la inflamación, pero esto suele ser algo se resuelve solo al paso del tiempo”, dice el Dr. Lin. “Los ejercicios pueden ayudar a rehabilitar el equilibrio normal una vez que tu cuerpo elimina el virus”.
La enfermedad de Ménière también se trata con esteroides y ejercicios de rehabilitación, aunque si una persona experimenta múltiples episodios de vértigo durante muchos años, se pueden recomendar cambios en la dieta y/u otros medicamentos, como diuréticos.
Para las otras causas de trastornos del equilibrio, los relacionados con los ojos, el cerebro, la circulación o el control muscular, el especialista correspondiente te ayudará a comprender cómo debe ser tu tratamiento específico.