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Esperanzados en acción de Dios, de Natura o la medicina

Por Luis Martínez Wolf

Barloventeando

Hemos vivido todo este dramático año de 2020 sometidos a la amenaza de la acción virulenta y su proceso contagioso e infeccioso, pero al mismo tiempo, mantenemos viva la esperanza de una potestad divina, abstracta o humana, nos pueda ayudar a sobrevivir, la esperanza es lo único que está funcionando pues las diversas versiones pretendidamente científicas, han resultado equivocadas, ni son tan efectivos algunos medicamentos, ni se tiene la vacuna salvadora o protectora de la acción maligna de SARS–CoV-2. Queda solo la acción divina, pero parece nos ha olvidado.

Lo más grave de la Pandemia es la declaración falsa de los funcionarios gubernamentales, en un afán de tener sometidos al voto electoral de la población, nos mienten, haciéndonos creer que la vacuna está a tiro de canate, llega por vía aérea un lote de poco mas de 3000 dosis de la vacuna que puede actuar contra el COVID 19 actuante de momento, se arma un verdadero mitin político en el aeropuerto para propalar que disponemos ya de la vacuna, merced a la acción administrativa y financiera del gobierno, una burla que solo algunos desesperados por sobrevivir, piensan que la acción oficial nos está salvando, solo con mencionar lo relativo a la clase de vacuna que llegó, servirá para vacunar a poco menos de 2000 seres a dos aplicaciones por persona.

Urge que el Gobierno haga saber a la ciudadanía que la vacuna protectora no es panacea contra los virus actuantes vigentes, las cepas derivadas de modificaciones en la estructura biológica del virus, hace inofensiva la vacuna, algún grupo científico declaró que la mutación del CORONA VIRUS, rebasa con mucho la capacidad de la vacuna que nos llegó, aparecerán nuevas cepas y nos tendrán inermes ante su acción, ¿Qué hacer?

 Los creyentes, someterse a la voluntad divina e implorar por una salvación cuya cura es desconocida. Los científicos actúan, pero están desarmados ante el proceso de mutación del Corona virus, poco por hacer, más que implorar a Dios y someternos a un proceso de reforzamiento de nuestras defensas, para en el caso de ser atracados por el virus, no nos mate, solo mortifique.  Recurrir a los medicamentos antivirales, parece dos o tres de ellos funcionan, podemos sobrevivir, pero la solución definitiva aún no existe.

Las indicaciones de los médicos deben ser atendidas, el uso del tapaboca y nariz, nos defiende hasta cierto grado,  importante su uso para no transmitir la infección, la sana distancia., valen, pero su aplicación muestra que es imposible, nos arrejuntamos y vamos a lugares concurridos donde nadie le teme al Virus, mantener vida saludable es de capital importancia, comida sana y en la dosis adecuada, mantener el cuerpo activo con gimnasia ligera o caminata y esperar, vivir esperanzados en que la divina providencia, o la acción redentora de natura, nos sea propicia y esperar que la malignidad de los cambios por mutación no sean tan severos como el actual y sobre todo, vivir con la esperanza que de peores crisis hemos sido librados, aceptar que este virus puede mantenerse actuante, más de lo esperado, el 71 será pesado. ¡AGUAS!

Diciembre 27 de 2020        [email protected]         Luis Martínez Wolf