Ser viejo y trabajar es un absurdo, mejor se tolera robar

Barloventeando

         Escucho con asombro los alegatos de los políticos que manejan el asunto de pensiones y pensionados, en virtud de que los mal manejadores del capital generado por los trabajadores, no tienen llenadero, además de hacer la espeluznante declaración de que el IMSS está en bancarrota y los pensionados corren el peligro de quedarse sin el sustento de su pensión, aquellos valientes que se han atrevido a mantenerse en actividad, descubren que son ciudadanos de segunda, todas las paparruchadas declarativas respecto a la protección de los adultos, choca con la realidad, los adultos son una carga que nadie quiere soportar, el desprecio, el abandono, la discriminación y propuesta de eutanasia son las únicas formulas de trato. Para fortuna de IMSS llegó el COVID19 en su auxilio.

         Yo soy uno de los especimenes que a pesar de mis 88 años, estoy en la brega, pensaba que era gente normal, que podía trabajar y se otorgaba reconocimiento a mi esfuerzo, ¡Estúpido de mi!, a mis seres queridos debo dejar de quererlos para tranquilidad de ellos y mía, yo no soy sujeto de empleo, pues buscan las empresas chavos de 25-35 años, los de mas edad son repudiados, los que presumen de trabajadores a mi edad nos tildan de locos y no recibimos estimulo emocional por el esfuerzo de servir al país con nuestra actividad, ni pensar en el mundo de las finanzas, los ancianos de mas de 65 años, no existen en el espacio de los negocios financieros o de crédito.

         La semana pasada tuve la osadía de acercarme a una empresa automotriz que ofrecía crédito en la compra de sus vehículos, me interesé por una camioneta de carga, me pidieron mil y una cosa para autorizar el crédito a 18 meses, plazo que solicité para pagar el vehículo, después de 8 días en que los expertos de crédito estudiaron mi solicitud, hoy me informan que por causa de mi edad no soy sujeto de crédito, me quedé preocupado pues si el carro me lo entregan a pagar en un año como lo había solicitado y doy un enganche del 25%, estos jijos de su jijurria, me dan por cadáver en menos de 12 meses, tiempo en que les pagaría el vehículo. Pienso que además de ser pájaros agoreros, son unos pendejos que hacen perder el tiempo a quienes nos acercamos a ellos, simplemente cuando inquirí sobre las condiciones de crédito me hubieran preguntado la edad y nos hubiéramos ahorrados la pérdida de tiempo, mía y de ellos.

         Creo que esas vaciladas del INSEN, PYMES, y demás instituciones para ayuda a empresarios, adultos mayores y la mujer, solo fueron creados para dar chamba a políticos que no saben hacer nada, a los viejos nos tratan como perros sarnosos, tanto en el IMSS, como en el ISSTE, algo deberá hacer algún político verdadero, con sentido humanitario para evitar el despilfarro de dinero que representan organismos que sirven para pura mierda, a quien trabaja y busca apoyo, crediticio o en especie comercial fungible, se le debe dar auxilio, investigarlo para darle apoyo, no para decirle que es un pinche viejo que no sirve para nada. Cuídese los políticos de la rebelión de los viejos humillados. ¡AGUAS!

Agosto 7 del 2020       [email protected]          Luis Martínez Wolf