O P I N I O N
En el medio político siempre se ha especulado con la situación qué del quinto año en adelante en gran parte de los diferentes sexenios, todo comienza a declinar.
Comenzando con la pérdida de popularidad de quien sea el titular del Poder Ejecutivo, por varias razones que van desde el desgaste que el poder causa a quien lo ejerce, hasta el manejo que se hizo de este que pudo ser bueno, regular o malo.
Obviamente quién lo hizo mal, tendrá una caída más rápida y profunda, en comparación con quién lo hizo mejor. Siendo difícil encontrar a quién lo hizo bien, ya que en la interesante y complicada actividad política es muy difícil encontrar, aunque los ha habido, a quién llevo a cabo bien lo que le correspondió hacer.
Así tenemos que el sexenio que ha gobernado Andrés Manuel López Obrador (AMLO) está llegando a su fin y como es normal, no es la excepción a la situación descrita.
Periodo de gobierno que se ha caracterizado por no tener una política efectiva para combatir a la delincuencia organizada, que a partir del pasado mes de diciembre del año 2023 se incrementó. Y durante el tiempo que ha transcurrido del presente 2024 se está saliendo de control en todo el país.
Como lo que durante las últimas semanas ha pasado en el Estado de Guerrero, concretamente en el puerto de Acapulco y su capital Chilpancingo, en donde el transporte público se suspendió afectando esto a toda la población, quedando estos lugares semiparalizados en sus actividades. Siendo que en su Capital se ha podido regresar a la “normalidad” debido a la intervención de los sacerdotes de la Iglesia Católica. Situación que no se sabe cuanto tiempo durará en paz, lamentablemente.
Grave problema al que hay que agregar las declaraciones de medios de comunicación norteamericanos, basados en investigaciones de la oficina de la DEA de ese país, en las que se acusa a integrantes del equipo de campaña de AMLO, durante el proceso electoral del año 2006 de haber recibido dinero de parte de integrantes del crimen organizado. Investigación que hasta el momento el gobierno del vecino país al norte del Río Bravo solamente ha expresado que la investigación está cerrada.
Y también aquí en casa otra de las acciones que ha molestado a AMLO ha sido el reciente cambio de medida cautelar al exdirector de la paraestatal Petróleos Mexicanos (PEMEX), Emilio Lozoya de parte de un juez federal para que continué su proceso fuera del reclusorio, en su casa por los delitos: lavado de dinero, asociación delictuosa y cohecho. Lo que motivo gran molestia de AMLO, al grado de expresar, como lo ha hecho en otras ocasiones, que el Poder Judicial esta “podrido”. Y no como antes cuando era su presidente el magistrado Arturo Zaldivar, al que “respetuosamente” le sugería que determinadas acciones deberían hacerse con cuidado. Manifestando que eso ya no lo puede hacer ahora que la magistrada presidenta es Norma Lucía Piña Hernández.
Declaración la anterior que ha causado la molestia e inconformidad de todas las asociaciones, barras y organizaciones de profesionales del derecho del país, al reconocer, el propio AMLO, porque él lo dijo, su forma de no respetar la autonomía de los poderes de la Unión e intromisión en el Poder Judicial en su momento.
Lo citado son solamente tres de las varias situaciones que se están presentando en estos momentos en México, aunque lamentablemente hay otras más, durante el último año de gobierno de AMLO. Por lo que ojalá no se presenten más y las que están pasando no vayan a agravarse, lo que si se quiere se puede evitar. Ya que está en desarrollo el proceso electoral más importante para los mexicanos de los últimos cincuenta años. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el lunes. [email protected] (Fech. Púb. Vier. 23-febrero-24)
Lamentable cierre de sexenio.
Por: Mario Javier Sánchez de la
Torre.