Mariana de la Cruz Sánchez, General Brigadier de Justicia Militar, hizo historia al ser nombrada como la nueva titular de la Defensoría de Oficio Militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa). Su llegada representa un avance significativo en la inclusión de mujeres en posiciones de liderazgo en el ámbito militar.
De acuerdo con el Código de Justicia Militar, la Defensoría de Oficio es una institución clave en el sistema de justicia militar en México para brindar defensa legal a las y los imputados por delitos del fuero militar que no cuenten con un abogado particular. Este organismo asegura que las personas sujetas a procesos judiciales dentro de este ámbito gocen del derecho a una representación jurídica adecuada.
Su función principal es garantizar una defensa efectiva durante todas las etapas del proceso judicial. Entre sus responsabilidades destacan la orientación jurídica durante las audiencias y el litigio, así como la provisión de recursos legales en defensa de las personas acusadas. La labor de la Defensoría de Oficio no se limita a tribunales militares, sino que también pueden extenderse a instancias civiles.
La trayectoria de Mariana de la Cruz
Mariana inició su formación en la Escuela Militar de Enfermeras. Posteriormente, cursó la Licenciatura en Derecho en la Universidad del Valle de México con una especialidad en Derecho Penal y diversas maestrías en Gerencia Pública y Seguridad Nacional. También se especializó en Juicio Oral y Proceso Penal Acusatorio, consolidándose como una experta en materia de justicia penal y sistemas jurídicos.
A lo largo de su carrera, ha ocupado diversos cargos relevantes en el ámbito militar. Se desempeñó como jefa del Grupo de Promoción y Difusión de la Cultura de Equidad de Género en la Dirección General de Derechos Humanos. También fue líder en el Observatorio para la Igualdad entre Mujeres y Hombres en el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
En el ámbito jurídico, fue jueza del Juzgado Militar de Control en la Séptima Región Militar. Por otro lado, ejerció como Defensora General Adjunta de la Defensoría de Oficio Militar, experiencia que la preparó para asumir su actual cargo. En 2023 fue ascendida al grado de General Brigadier, convirtiéndose en la única mujer en ese rango especializada en Justicia Militar dentro de la Defensa.
Ahora que está al frente de la Defensoría de Oficio Militar, Mariana asume el desafío de garantizar una defensa legal justa y adecuada para los integrantes de las Fuerzas Armadas, sobre todo de las mujeres quienes afrontan diferentes violencias y retos para permanecer en esta institución.
Rompiendo el techo de cristal, los avances de la inclusión de mujeres en puestos militares
A lo largo de la historia de México, la mujer ha jugado un papel crucial en el ámbito sociocultural y en el Ejército Mexicano. Desde la Revolución Mexicana en 1919, su participación se ha integrado progresivamente en roles administrativos, logísticos, operativos y militares, consolidando la democracia y libertad en el país.
Desde su ingreso inicial como enfermeras, las mujeres han ampliado su presencia en diversos campos como medicina, ingeniería, aviación y áreas administrativas para consolidar su prole en la defensa de la nación. De acuerdo con un boletín de Inmujeres, para 2020 la inclusión de las mujeres en diferentes instituciones militares estaba conformada de la siguiente manera:
La incorporación de mujeres en Ejército y Fuerza Aérea comenzó con la creación de la Escuela Militar de Enfermeras, el Heroico Colegio Militar, la Escuela Militar de Ingenieros y el Colegio del Aire.
En 2019 aconteció un hito histórico cuando Karen Vanesa Velázquez Ruíz se convirtió en la primera mujer en pilotar un avión de combate.
En 2020, el Ejército contaba con 25 mil 495 mujeres representando el 11.9% de su personal.
Actualmente solo cuatro mujeres han alcanzado el rango de General Brigadier.
En la Secretaría de Marina, la participación femenina comenzó en el Servicio de Sanidad Naval y se fortaleció en 2010 con su incorporación en las unidades de Infantería de Marina.
Para 2018, las mujeres representaban el 17% del personal total.
Por su parte, para 2020, las mujeres de la Guardia Nacional ocuparon el 21.2% de su personal con un total de 3 mil 093 integrantes.
A pesar de los avances, se necesita implementar acciones afirmativas que aborden las brechas de género en las Fuerzas Armadas. Estas medidas son esenciales para superar los obstáculos que dificultan el acceso de las mujeres a posiciones de mayor jerarquía y responsabilidad. La perspectiva de género en los programas institucionales es clave para erradicar la discriminación y garantizar la plena participación de las mujeres en la defensa y seguridad del país.