El periodo de gobierno de Cuitláhuac García concluye en cinco meses y contados días, o sea, podrá asistir como gobernador a la toma de posesión presidencial de Claudia Sheimbaum, aunque como ocurre casi siempre en la especulación política se presume será invitado por la actual presidenta electa para que colabore en su gobierno. En realidad, la hipotética invitación se reactiva en cada fin de gobierno veracruzano aunque no siempre se concrete en hechos; la raíz de esa inferencia pudiera encontrar origen en cuando el general Manuel Ávila Camacho siendo candidato presidencial en 1940 invitó al gobernador veracruzano Miguel Alemán Valdés para que le coordinara su campaña proselitista, después de esa ocasión, ya como presidente, Alemán invitó al gobernador veracruzano Fernando Casas Alemán a su gabinete, después hizo igual invitación al gobernador Adolfo Ruiz Cortines. Tal debe ser el fondo histórico que explique por qué cada fin de sexenio en Veracruz se teoriza sobre una potencial invitación al gobernador para incorporarse al gabinete federal. Sin embargo, en lo sucesivo solo se repitió cuando eb 1988 Salinas de Gortari invitó al gobernador Gutiérrez Barriosa la Secretaría de Gobernación, solo cumplía dos años al frente del gobierno estatal. ¿Se hará realidad con Claudia Sheinbaum invitando a Cuitláhuac García? Poco vivirá quien no se entere, pero la ley de probabilidades está a favor de esa circunstancia porque son miles los cargos en el gobierno federal, excepto los muy contados en el gabinete presidencial, aunque no son pocos quienes dudan de su inclusión en el primer equipo gubernamental.
Ya se ha comentado que el balance del actual gobierno estatal no arroja resultados positivos porque en el escenario veracruzano deja poca constancia de políticas públicas reflejadas en obras, y la infraestructura física, urbana y rural, no ofrece constancia de expedientes cumplidos. Comparativamente, los gobiernos estatales de Murillo Vidal, Acosta Lagunes, Dante Delgado y Miguel Alemán Velasco sí aportaron datos duros de su paso por el gobierno veracruzano en obra pública imperecedera. En este siglo, Miguel Alemán, con el doctor Mauro Loyo al frente de la Secretaría de Salud, duplicó el número de hospitales en la entidad, modernizó el CECAN, amplió el Hospital Civil, el Centro de Especialidades “Rafael Lució y equipó un área importante del Hospital Regional de Veracruz. La obra carretera en los gobiernos citados hace constancia de una gestión pública exitosa, sin embargo, las circunstancias no se acomodaron para una invitación al gabinete federal, quizás ahora sí favorezcan a Cuitláhuac García para que, haya sido como haya sido, se incorpore el gobierno federal.