Opinión
Durante el pasado mes de febrero Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como parte de las últimas ocurrencias de su fracasado periodo de gobierno, envío al Congreso de la Unión un paquete de aproximadamente 20 reformas, la mayoría de estas inconstitucionales, teniendo con estas las claras intenciones de distraer la atención sobre lo que podría pasar durante los últimos meses del proceso electoral que está llevándose a cabo.
Lo que en parte sucedió, solo que debido a los tiempos legislativos sus corifeos en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, debido a sus torpezas les gano el tiempo y solamente pudieron abocarse a aprobar tres de estas quedando la mayoría en la congeladora legislativa, siendo una de las que lograron sacar adelante la que le proporcionara recursos frescos a la autollamada cuarta transformación (4T), a través del bautizado por morenistas como el Fondo de Pensiones del Bienestar (FPB).
El pretexto para la creación de este FPB le cayó como anillo al dedo a AMLO, ya que como dice el dicho: mató dos pájaros de un tiro. Por una parte aprovechó el periodo electoral para anunciar un incremento al cien por ciento en sus pensiones a determinado número de trabajadores, obviamente gracias a él y por la otra el obtener recursos frescos, ya que su gobierno además de haber endeudado al país más que todos los gobiernos anteriores, también ya se acabo todos los recursos de el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios y del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas. Dejando un déficit de 308 mil millones de pesos , ya que cuando inició su nefasto sexenio en 2018 había 368 mil millones de pesos y en febrero del presente año 2024 solamente quedan 59 mil millones de pesos. Lo que ha provocado en el medio económico-financiero del país, gran inquietud, porque no se tiene información al respecto en que se gastaron o invirtieron estos recursos de la Nación, emitiendo los analistas tanto del sector público como del privado sus opiniones en el sentido de que no le será posible -a AMLO- recuperar estas cantidades.
Situación la anterior por la que el llamado Fondo de Pensiones del Bienestar, es un Fondo que a diferencia de lo que son este tipo de figuras jurídico-económicas, inicia sin un centavo, en otras palabras “sin fondos”.
Razón por la que AMLO y secuaces en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión aprobaron el apoderarse de los recursos de los trabajadores mayores de 70 años, que tienen los ahorros de toda su vida en las Afores. Acción aunque la aprobaron los integrantes del grupo legislativo de Morena y partidos cómplices, como lo son el mal llamado Partido del Trabajo y los vividores del Verde Ecologista de México, es ilegal ya que atenta para comenzar con los derechos humanos de los trabajadores a quiénes les están robando sus ahorros.
Por el momento son 40 mil millones de pesos con los que se va a quedar AMLO y secuaces, a través de una figura jurídica que administrará el Banco de México y la también desprestigiada Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Aunque el subsecretario Yorio la semana pasada manifestó que el gobierno federal también, ahora sí, dejará 60 mil millones de pesos para el pago de pensiones a jubilados, a lo que agrego: hay que asegurar que el Fondo de Pensiones del Bienestar tanga dinero hasta el 2030 y después hacer acuerdos entre el gobierno, empresarios y trabajadores, para que siga teniendo recursos.
Palabra con las que el sub secretario Yorio, de alguna forma indica que el Fondo de Pensiones del Bienestar es inviable, no solamente porque inicia sin recursos propios, sino también porque su financiamiento es muy difícil de lograr. No cabe la menor duda que fue otra ocurrencia electoral de AMLO.
Razón por la que la firma Trusan & Romo, Abogados, está promoviendo el primer grupo de amparos, más de 700 de trabajadores tanto del sector público como del privado, debido entre otras anomalías la medida es inconstitucional porque es retroactiva y hasta ahora la retroactividad de la ley en este país no existe. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes. [email protected]