El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas dio luz verde el viernes a una propuesta para incrementar la asistencia humanitaria en la franja de Gaza. La resolución, redactada por Emiratos Árabes Unidos, fue aprobada con la abstención de Estados Unidos, evitando así un posible veto. La medida busca crear las condiciones necesarias para un cese sostenible de las hostilidades en el contexto del conflicto de 11 semanas entre Israel y Hamas.
La resolución destaca la necesidad de un acceso humanitario seguro, sin obstáculos y ampliado de manera inmediata, así como el establecimiento de las condiciones propicias para un cese duradero de las hostilidades. Aunque inicialmente se solicitaba un “cese urgente y sostenible de las hostilidades,” la redacción final generó ciertas ambigüedades que suscitaron preocupaciones entre miembros del Consejo, incluyendo a Rusia, que posee poder de veto.
La posición de Estados Unidos e Israel, opositores a un alto el fuego que consideran beneficiaría solo a Hamas, se evidenció con la abstención en la votación. A principios de este mes, la Asamblea General de la ONU había instado a un alto el fuego humanitario, aunque esta medida fue vetada por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad.
El conflicto, desencadenado por el ataque del 7 de octubre perpetrado por militantes de Hamas, ha llevado a una escalada de violencia con represalias por parte de Israel, incluyendo bombardeos aéreos, asedio y una ofensiva terrestre. Las autoridades sanitarias de Gaza reportan un alto número de víctimas palestinas, mientras que las advertencias de una catástrofe humanitaria en la región persisten, con la mitad de la población de Gaza enfrentando escasez alimentaria y limitado acceso a la asistencia humanitaria.
