En una trascendental sesión del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón expuso públicamente que Mónica Soto, Felipe de la Mata y Felipe Fuentes, sus colegas, le solicitaron de manera directa su renuncia al cargo de presidente de la Sala Superior del organismo. Este revelador momento ha puesto en jaque la estabilidad interna de la institución.
Frente a esta inesperada petición, el magistrado presidente solicitó un plazo de cuatro días para comunicar su decisión sobre la solicitud que le hicieron tres de sus compañeros. Esta pausa estratégica permitirá a Reyes Rodríguez ponderar su posición y definir si accederá a renunciar a su posición de liderazgo en la Sala Superior del Tribunal Electoral.
La magistrada Janine Otálora, quien respalda la continuidad de Reyes Rodríguez en la presidencia, propuso poner fin a la sesión y convocar a una nueva para abordar el delicado asunto. La propuesta fue aceptada y se acordó un receso de 15 minutos, durante el cual se esperaba que los ánimos se calmaran y se abriera la posibilidad de un diálogo más constructivo.
Sin embargo, al reanudarse la sesión después del receso, tanto el magistrado Reyes Rodríguez como Janine Otálora no se presentaron al Pleno. En ausencia de los dos protagonistas centrales, los magistrados restantes, Mónica Soto, Felipe de la Mata y Felipe Fuentes, se enfrascaron en un debate respecto a la necesidad de un cambio en la Presidencia de la Sala Superior del Tribunal Electoral. Finalmente, tras expresar sus posturas, los magistrados decidieron dar por concluida la sesión, dejando abierta la incertidumbre sobre el futuro del liderazgo en la institución.