El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció el domingo la suspensión de un miembro de su gabinete, el ministro de Patrimonio Amihay Eliyahu, luego de sus controvertidos comentarios sobre la posibilidad de un ataque nuclear en la región de Gaza. Este incidente ha generado una intensa reacción tanto a nivel nacional como internacional, en medio de la escalada del conflicto con el grupo militante Hamás y el aumento de las víctimas civiles palestinas en la zona.
Según informes oficiales, la oficina de Netanyahu emitió un comunicado confirmando la suspensión de Eliyahu de las reuniones del gabinete “hasta nuevo aviso”. El ministro de Patrimonio, quien pertenece a un partido de extrema derecha en la coalición gobernante, generó controversia durante una entrevista radiofónica al sugerir la opción de un ataque nuclear en respuesta a la situación en Gaza. Sus declaraciones provocaron un repudio inmediato en la comunidad árabe y generaron consternación tanto en los medios de comunicación israelíes como entre los funcionarios internacionales.
A pesar de la repercusión de sus palabras, tanto Eliyahu como el líder de su partido no forman parte del foro ministerial que supervisa directamente la situación en Gaza. Además, se ha señalado que es poco probable que tengan un conocimiento directo de las capacidades nucleares de Israel, que el país no reconoce públicamente, ni la autoridad para activar dicho armamento.
En respuesta a la controversia generada por los comentarios de Eliyahu, la oficina de Netanyahu emitió una declaración en la que enfatizaba que las declaraciones del ministro no se alineaban con la realidad, reafirmando el compromiso de Israel y las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) de operar de acuerdo con los estándares más estrictos del derecho internacional para minimizar el daño a civiles inocentes. La postura oficial subraya la firme determinación de Israel de continuar con sus operaciones de manera ética y respetuosa de los derechos humanos en medio del conflicto en curso en la región.
