El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha tomado la decisión de revocar la ratificación de Rusia del Tratado de Prohibición Completa de Ensayos Nucleares (CTBT) mediante la firma de una ley aprobada previamente por el Parlamento ruso. Este movimiento se ha interpretado como una respuesta directa a la falta de ratificación del tratado por parte de Estados Unidos, lo que ha exacerbado las tensiones en el ámbito del control de armas nucleares entre las dos potencias.
La ley recién firmada por Putin fue publicada en la página web oficial del Gobierno, y se prevé que entre en vigor en la fecha de su publicación oficial. Este giro en la política nuclear rusa llega después de una serie de alteraciones en los tratados nucleares existentes, incluida la suspensión de la participación de Rusia, aunque no su retirada, del Nuevo Tratado START de reducción de armas nucleares en febrero de 2023.
El CTBT, adoptado en 1996, tiene como objetivo prohibir los ensayos nucleares en todo el mundo, pero su efectividad ha sido limitada debido a la falta de ratificación de algunos países clave, incluidos Estados Unidos y China. La negativa de Estados Unidos a ratificar el tratado ha provocado críticas y tensiones en el escenario internacional, y la decisión reciente de Rusia de retirar su ratificación se considera un reflejo de la compleja dinámica geopolítica en torno al control de armas nucleares.
En cuanto al Nuevo Tratado START, las inspecciones de instalaciones nucleares se habían interrumpido desde 2020 debido a la pandemia de COVID-19, lo que generó preocupaciones adicionales sobre el cumplimiento de los acuerdos por parte de Rusia. Funcionarios estadounidenses han expresado su inquietud por la falta de cooperación de Rusia en facilitar las actividades de inspección en su territorio, lo que ha planteado serias dudas sobre la viabilidad a largo plazo del control de armas nucleares entre ambas naciones.