Samvel Shahramanian, líder de Nagorno Karabaj, ha anunciado que la autoproclamada república dejará de existir el próximo año, según informes recientes. Shahramanian emitió una orden que disuelve todas las instituciones estatales a partir del 1 de enero.
La región de Nagorno Karabaj, que estuvo bajo control de la etnia armenia durante tres décadas, fue capturada por Azerbaiyán la semana pasada, lo que resultó en la huida de más de la mitad de su población.
Aunque internacionalmente se reconoce a Nagorno Karabaj como parte de Azerbaiyán, Armenia tomó el control en la década de 1990 tras la caída de la Unión Soviética.
Shahramanian ha justificado la decisión de disolver el Estado basándose en la “prioridad de garantizar la seguridad física y los intereses vitales del pueblo”, haciendo referencia al compromiso de Azerbaiyán de permitir un viaje libre y voluntario para los residentes.
El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinian, expresó su preocupación de que ya no queden armenios en Nagorno Karabaj en los próximos días y ha pedido la intervención de la comunidad internacional.
Los gobiernos occidentales han estado presionando a Azerbaiyán para permitir la entrada de observadores internacionales a Nagorno Karabaj, pero aún no se ha otorgado acceso.
Mientras tanto, un exlíder del enclave, Ruben Vardanian, fue arrestado en Azerbaiyán bajo acusaciones de financiación del terrorismo. Las autoridades azerbaiyanas también han mencionado la intención de aplicar una “amnistía a los combatientes armenios que depusieron las armas en Nagorno Karabaj”, mientras insisten en que aquellos que hayan cometido “crímenes de guerra” deben ser entregados.
Respecto a la población que huye de Nagorno Karabaj hacia Armenia, las autoridades armenias están brindando ayuda y refugio, y la solidaridad de los ciudadanos se ha reflejado en la oferta de alojamiento gratuito y otras formas de asistencia a los refugiados en Armenia.