Un reciente estudio publicado en la revista Science revela que el narcotráfico en México se ubica como el quinto empleador más grande en el país, con una estimación de entre 160,000 y 185,000 personas involucradas en sus filas. Estas cifras superan a las de empresas conocidas como Oxxo o Pemex. Según el análisis del Complexity Science Hub de Viena, la única manera efectiva de reducir su influencia es prevenir el reclutamiento de nuevos miembros, ya que estos grupos criminales continúan incorporando aproximadamente 350 personas cada semana.
El líder de la investigación, Rafael Prieto Curiel, un expolicía de Ciudad de México, subraya que ni los tribunales ni las cárceles son la solución para reducir la violencia en México. El estudio se basa en una combinación de datos que abarcan asesinatos, desapariciones, encarcelamientos y deserciones de miembros de organizaciones criminales desde 2012 hasta 2022.
Un dato preocupante revelado por el estudio es que, a pesar de miles de detenciones de delincuentes, estas organizaciones son ahora más grandes que hace una década. Cada año, las autoridades mexicanas arrestan a alrededor de 6,000 miembros de cárteles, pero en 2022, los grupos criminales tienen aproximadamente 60,000 miembros más que en 2012. Esto coloca a los cárteles como el quinto mayor empleador en México, solo detrás de FEMSA, Walmart, Manpower y América Móvil, superando incluso a empresas como Pemex y Oxxo.
El estudio también proporciona información sobre la composición de estos grupos criminales, destacando que casi dos de cada diez miembros están vinculados al Cartel Jalisco Nueva Generación, y uno de cada diez al Cartel de Sinaloa. Vale la pena señalar que estos datos solo incluyen a personas directamente relacionadas con actividades violentas, excluyendo a otros individuos involucrados en el narcotráfico, como los lavadores de dinero.
Además, se observa que estos cárteles están perdiendo una parte significativa de sus miembros debido a la violencia, con un 17% de las personas reclutadas muriendo en un período de diez años. Esta tasa de pérdida de miembros significa que los cárteles necesitan reclutar a 350 personas cada semana para evitar su colapso. El reclutamiento forzoso es un método común utilizado por estos grupos criminales y genera un profundo sufrimiento para las familias de las personas desaparecidas.
El estudio destaca que reducir a la mitad el reclutamiento de cárteles para 2027 podría disminuir su tamaño en un 11%. Esto demuestra que una estrategia preventiva es más efectiva desde una perspectiva matemática que una estrategia reactiva tradicional. Sin embargo, si los cárteles continúan con su actual ritmo de reclutamiento y violencia, se podría esperar un aumento del 40% en las tasas de mortalidad y un crecimiento del 26% en las organizaciones para 2027.
Este estudio representa uno de los primeros intentos de cuantificar el poder del narcotráfico en México en términos numéricos. Debido a la complejidad y opacidad de este fenómeno en todo el territorio mexicano, se considera un importante avance en la comprensión de esta problemática. Los expertos en el campo ven el modelo matemático generado como un punto de partida valioso para futuras investigaciones sobre los cárteles y alientan a los gobiernos a probar estrategias alternativas para abordar el narcotráfico.