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Federación Española de Fútbol acusa a Jennifer Hermoso de falsedad en el caso del beso del presidente

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha lanzado acusaciones en contra de Jennifer Hermoso, una destacada jugadora del país, alegando que mintió sobre un beso no consensuado por parte del presidente de la federación, Luis Rubiales. En respuesta, la RFEF amenazó con emprender acciones legales contra ella.

Hermoso afirmó el viernes que en ningún momento había dado su consentimiento para el beso del líder máximo del fútbol del país, ocurrido durante la ceremonia de entrega de medallas después de que España ganara el Mundial Femenino de Fútbol. A través de redes sociales, expresó sentirse vulnerable y víctima de un acto impulsivo, sexista y fuera de lugar.

En un comunicado emitido el mismo viernes como respuesta a Hermoso y a la Asociación de Futbolistas Profesionales de España (FUTPRO), la federación respaldó a Rubiales, describiendo el beso como “mutuo” y criticando lo que llamó “campañas injustas” y “falso feminismo”.

La RFEF afirmó de manera concluyente que el presidente no había mentido, presentando descripciones de fotografías que pretendían respaldar la versión de Rubiales.

Además, la federación anunció su intención de emprender acciones legales en contra de cualquier difamación, ya sea por parte de Hermoso o por terceros en su nombre.

La federación también hizo hincapié en que las jugadoras tienen la “obligación” de participar en los partidos para los que sean convocadas. Esta declaración siguió a la decisión de casi 50 futbolistas profesionales y las 23 jugadoras del equipo nacional español de no jugar con el país nuevamente hasta que Rubiales sea destituido.

El sábado, la RFEF reafirmó sus acusaciones contra Hermoso y amenazó nuevamente con acciones legales en una declaración que luego fue eliminada de su sitio web, sin explicación.

La FIFA tomó medidas provisionales suspendiendo a Rubiales de todas las actividades relacionadas con el fútbol tras abrir un procedimiento disciplinario en su contra por violar las reglas básicas de conducta decente del juego.

Luis Rubiales fue notificado de la suspensión y se le prohibió contactar a Hermoso o a su entorno cercano. La UEFA y la RFEF también fueron informadas de esta decisión.

En respuesta, la RFEF reconoció la suspensión de Rubiales por parte de la FIFA y expresó su confianza en que se demostrará su plena inocencia. El vicepresidente Pedro Rocha fue designado presidente interino.

El incidente que desencadenó esta controversia ocurrió después de que España ganara el Mundial Femenino de Fútbol en 2023. Luis Rubiales fue captado besando a Hermoso en la ceremonia de entrega de medallas, a lo que Hermoso reaccionó expresando su disgusto y sorpresa.

Rubiales, después de inicialmente disculparse por su acción, ha enfrentado críticas tanto del mundo del fútbol como de políticos españoles. En su discurso desafiante en la Asamblea General Extraordinaria de la federación, rechazó renunciar. En respuesta, Hermoso mantuvo sus declaraciones y describió haber sido presionada para emitir una declaración que justificara las acciones de Rubiales.

Esta situación ha desencadenado un debate en el fútbol español sobre cuestiones de consentimiento y equidad de género.