CAFÉ DE MAÑANA
La temporada de frentes fríos en México inició en septiembre pasado y concluye en mayo próximo, pero aún faltan varios sistemas frontales que provocarán el descenso de temperatura, heladas y lluvias.
Dichas condiciones meteorológicas en el radar de la administración pública en Veracruz no tenía previsto la aparición del fenómeno “ARALY”.
Desde el enfoque conceptual de la protección civil el fenómeno “Araly” dejó de ser un cambio atmosférico y quizá pase a dimensiones de un sismo o terremoto equivalente a un movimiento destructivo con otras características de riesgo.
En el tema en torno a la persona de nombre “Araly” y de quien se asegura representa a quien o quiénes han recibido contratos por adjudicación de proveedor de servicios en algunas entidades públicas, lleva a sospechar que el fenómeno provocó niveles de mayor destrucción en la estructura de la administración pública en algunas de las dependencias.
Los vientos huracanados en temporada de frentes fríos por la recta final del régimen pasó a un sismo que lleva a dimensiones de terremoto pues, todo hace suponer que habrá la necesidad de levantar la destrucción en varios sitios, lo que debe reconocerse al ser a tiempo.
De entrada las unidades administrativas que adjudicaron contratos no deben ni pueden estar excentos, sin descartar que hayan hecho todo legalmente.
Los órganos internos de control, están en una posición incómoda y expuesta, que obliga a fijar su posición.
Incluso, habrá que saber si la revisión externa que suelen contratar para ir acompañando los procesos, lo indicaron y observaron en algún testimonio o igual están en el ojo de las observaciones.
Parece una red poco bien construida y si fuera época de acróbatas circenses en el trapecio, no hay malla de protección que les salve pues, están muy lejos de ser expertos como algunos otros y hasta podrían ser contratados por el cirque du soleil.
Debemos recordar la declaración de Doña Mercedes Santoyo Domínguez, titular de la Contraloría General del Estado, al señalar que había 1,300 servidores públicos “observados,” por no cumplir en 2022 con la declaración por modificación patrimonial y después, todo se fue diluyendo y nada se supo, dijo o hizo en términos de sanción.
Desde ese momento ya hacía necesario reorientar la conducta de funcionarios empezando desde los titulares de las unidades administrativas o equivalentes y hasta en otros niveles de despacho, y donde las contralorias internas juegan un rol fundamental.
El terreno es escabroso; podría llevar este caso a niveles de sanción ejemplar para que más de uno ponga sus barbas a remojar.
Después de todo esto aún falta al final la etapa de fiscalización y todo servidor público debe saber y entender que en cualquier momento puede convertirse en un fusible; sirve o se funde y cambia.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Un abrazo deseando que la fraternidad de la amistad sincera y duradera – no sólo hoy Día de San Valentín y festividad de habla hispana – sea plena entre todos los seres humanos más allá de cualquier diferencia de enfoque.
¡ ES CUANTO !