Una más de las máximas utilizadas por Andrés Manuel y no cumplidas, además de: no mentir, no robar y no traicionar, ha sido, que la deuda pública del país no aumentaría.

    Siendo que la materia económica, se noto desde el inicio de la presente administración federal, era algo que no conocía y por tanto cuando hablaba sobre el tema, casi siempre lo hacía con imprecisiones.

    Situación que fue evidente en forma contundente en las erróneas decisiones tomadas sobre la materia desde el inicio de su sexenio, así como también cuando la pandemia del SARS-COV2, apareció entre la población mexicana, provocando la inactividad de todo tipo en el país, siendo en el aspecto económico en el que tomó las más equivocadas decisiones. Teniendo importantes ejemplos al respecto, conocidos por todos, que no vale la pena recordar.

    Pero lamentablemente después de más de tres años de tener la responsabilidad de gobernar, en el aspecto económico las cosas en lugar de haber mejorado, están empeorando. Una muestra de lo citado es la información dada a conocer a cerca de que el Gobierno de la llamada cuarta transformación, ha gastado el 85 % de los fondos: de Estabilización de Ingresos Presupuestarios y de las Entidades Federativas. Que al inicio de la presente administración tenían: 323, 039 millones de pesos y al pasado mes de junio la cantidad ascendía a: 45, 922 millones de pesos. Fondos qué según la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, son o en el caso que nos ocupa eran, para utilizarse con fines de estabilización presupuestal, pues se obtuvieron de excedentes recaudatorios durante los últimos 20 años.

    Posición de la economía nacional a la que hay que sumar lo reconocido honestamente por el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, durante su comparecencia ante el Pleno de la Cámara de Diputados, con motivo de la Glosa del Cuarto Informe de Gobierno, al decir que la deuda de México ha aumentado un 7 % durante los cuatro años del presente gobierno. Lo que hace que el saldo de la deuda mexicana al cierre del presente año 2022, equivaldrá al 48.9 % del Producto Interno Bruto.

    Por lo que respecta al Paquete Económico 2023, el Proyecto de Decreto del Presupuesto de Egresos de la Federación, equivale a 8.2 billones de pesos, que producirá un costo financiero (pago de intereses) de aproximadamente un billón de pesos.

    En cuanto a las medidas que está tomando el Banco de México para combatir la imparable inflación, que a mediados de septiembre fue del 8.7 %, hoy la Junta de Gobierno por unanimidad tomo la decisión de aumentar la tasa en 75 puntos, quedando en 9.25. Funcionando de alguna forma como lo está haciendo la Reserva Federal de los Estados Unidos, con una finalidad totalmente proteccionista.    Como se aprecia en lo citado, la cuestión económica nacional no anda del todo bien, como sucede en otros aspectos de la vida del país y desgraciadamente no se nota acción alguna para corregir las cosas al respecto. Esperemos que no antepongan los integrantes de la administración que tiene a su cargo el Movimiento de Regeneración Nacional, la cuestión electoral a la económica, porque de ser así, la situación no va a estar bien para nadie. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el martes. [email protected]