El sábado 20 de agosto, el último día de semana 20 del tiempo ordinario, ya entrando en las vísperas del domingo, o sea a las 18 horas. Fui informado del fallecimiento del sacerdote Misael Cruz Sánchez, acaecido en la ciudad de México, luego de una larga enfermedad, y un par de operaciones. En estos últimos años de su vida, regresó a vivir a la casa de un hermano en la capital del país. En la información enviada por una grabación del WhatsApp, nos informaba que sus exequias serían en la CDMX, el lunes 22 del octavo mes. Fue velado dos días. El sacerdote, don Rafael González, de la oficina de las causas de los Santos de la arquidiócesis de Xalapa, se trasladó hasta la ciudad de México, para presidir las exequias en una funeraria de Gayosso, acompañado por un reducido número de files xalapeños, que le fueron a dar el último adiós, a su amado pastor.
Nacido en el municipio de Vega de Alatorre, en corazón del Totonacapan, el 3 de julio de 1937, eclesiásticamente nació en el recién creado obispado de Papantla, en el año de 1922, por quinto obispo de Veracruz, Rafael Guizar y Valencia, (1878-1938). Fue el menor de 4 hermanos, dos hombres y una mujer. Por más de 20 años conviviendo con el padre Misael, y nunca se ocurrió preguntarle sobre su biografía tanto familiar como eclesiásticas. Fue un sacerdote muy prudente en todos los sentidos. Y con un diálogo fluido. Tengo entendido que su formación religiosa se realizó en el Seminario de la Ciudad de México., y más tarde fue enviado a estudiar al Seminario interdiocesano de Montezuma en los Estados Unidos, cuyo nombre oficial es Pontificio Seminario Central Mexicano de Nuestra Señora de Guadalupe;. Fue un alumno preconciliar. Es ordenado presbítero de la Iglesia Católica Apostólica Romana. El primero de diciembre de 1963, justamente cuando en Roma se realizaban los trabajos del Concilio Vaticano II, convocado por San Juan XXIII,(1881-1963) y sancionado por San Paulo VI.(1891-1978)Es decir que P. Cruz Sánchez, pertenece a esa generación de sacerdotes, bajo la guía de los nuevos lineamientos del Conciliares.
La Iglesia lo envió a estudiar a Alemania, como también los realizó el Padre José Benigno Zilli, el primer párroco de la Iglesia de Nuestro Señor del Calvario, erigida en 1971, por el segundo arzobispo de Xalapa, don Emilio Abascal y Salmerón. Ha sido muy difícil conseguir más datos biográficos del Padre Misael. Agradezco a algunas hermanas del Calvario, por darle datos.
Fue formador del Seminario Mayor de Xalapa, vicario de la parroquia del Calvario en la ciudad de Coatepec. Responsable del Movimiento Familiar Cristiano.En la década de los ochenta del siglo XX, fue párroco de los Corazones. El III arzobispo de Xalapa, don Sergio Obeso Rivera, lo designó como el cuarto párroco de nuestro Señor del Calvario; el viernes tres de febrero de 1989, bajo el pontificado de San Juan Pablo II ( 1920-2005), tomó posesión de la parroquia, ceremonia presidida por el Cardenal, Sergio Obeso Rivera, en dicho acontecimiento fue acompañado por grupo de sacerdotes. Todo un acontecimiento, la parroquia había sido presidida por don Gustavo Lima Vázquez. Y como párroco de la céntrica parroquia de Nuestro Señor del Calvario, ha sido el sacerdote que más tiempo ha estado al frente, 23 años. En agosto del 2012, por haber llegado a la edad de los 75 años, dejó la parroquia. Estos últimos díez años de su vida, cambió de ciudad, se fue a vivir a la capital del país, en casa de un hermano. Pero no significó que perdiera contacto con algunos feligreses del Calvario, hasta el último día de su vida. Un amante de la naturaleza.
Durante su responsabilidad pastoral en la parroquia del Calvario, el Arzobispo de Xalapa, en 1991, lo designó como Vicario General de la arquidiócesis de Xalapa. Fue un año vital en el marco de las relaciones de la Iglesia con el Estado Mexicano, el presidente Carlos Salinas de Gortari, (1988-1994). Sin olvidar que el III arzobispo de Xalapa, tres veces tuvo la responsabilidad de la presidencia de la conferencia del Episcapado Mexicano, y tener un Vicario General como el padre Misael Cruz, un sacerdote con una formación sólida. Un diplomático para con sus hermanos en el magisterio de la Iglesia. Nunca busco los reflectores, siempre fiel a su obispo. En dicho cargo duró también dos décadas.Sin olvidar a grey de feligreses en el Calvario. Donde tuve el privilegio de establecer un amistad. Hoy lo recuerdo con mucho cariño, cada vez que se publicaba alguna nota o artículo de mi autoría, en las páginas del semanario alégrate, me daba sus observaciones.
Con 23 años como sacerdote de la Parroquia de nuestro del Calvario, un templo construido en el virreinato, y tuvo un especial cariño de los retablos que se conservan al interior del templo, que pertenecieron al desaparecido convento de la Natividad de Nuestra Señora, levantada en el siglo XVI, perteneciente a los franciscanos. También lo recordamos por haber adquirido la Casa de Evangelización Juan Pablo II de la calle de Insurgentes. También verlo sufrir por su parroquia, luego de un sacrilegio; nunca falta los enemigos de la Iglesia. Al igual que los párrocos José B. Zilli y Gustavo Lima, Salvador Morales, fallecen sus señoras madres, durante su paso por el Calvario.
También lo recuerdo como un gran promotor de los jóvenes de su parroquia que participan, y un ejemplo, el caso del presbítero Marco Polo, quien trabajó su vocación con su párroco. Sus restos fueron cremados y depositados en la Catedral Metropolitana de la ciudad de México, en compañía de sus seres queridos.