Opinión
Uno de los principales temas de la agenda para este 2022 de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), es la llamada reforma eléctrica, que realmente es una contrarreforma a la reforma realizada por el gobierno de Enrique Peña Nieto a la legislación vigente correspondiente durante su periodo de gobierno.
Tema que durante la última semana ha pasado a segundo en importancia debido a la interesante noticia que el periodista Carlos Loret de Mola puso como principal, en el interés nacional, al dar a conocer la forma lujosa, extravagante, “machuchona”, de vivir en el vecino país del norte del primogénito del guía espiritual y fundador del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), quien a diario desde su desprestigiada mañanera pregona la forma de austeridad en que supuestamente vive, así como también los servidores públicos que forman su equipo de trabajo y como tienen la obligación de vivir todos los mexicanos.
Pero la realidad es que el espinoso asunto del tema eléctrico, es demasiado grande para el equipo de trabajo que AMLO tiene destinado para “arreglarlo”. Sin lugar a dudas la iniciativa de efectuar el Parlamento Abierto sobre el tema, que tiene todo el apoyo del diputado veracruzano Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Cámara de Diputados, es un acierto, pues para llevar a cabo una acción de esa envergadura se requiere de escuchar no solamente a los políticos, sino lo más importante, al sector privado y al científico, que son los que realmente conocen el especializado tema, lo que hasta la realización de los once foros de un total de diecinueve, se ha dado así: 21 espacios para los representantes del gobierno, 22 para los empresarios y solamente 14 para los científicos.
Tema que independientemente que esté en segundo en importancia en la opinión pública mexicana, es el principal, lo que quedó demostrado con la interpretación que AMLO le quiso dar a las declaraciones del embajador de los Estados Unidos de Norteamérica (EU), Ken Salazar, de que estaba de acuerdo con sus reformas a la citada legislación, lo que es cierto en cuanto a que las leyes siempre necesitan reformas, que sí lo dijo, pero no lo que pretende hacer el oriundo de Tabasco.
A continuación parte de lo expresado por Ken Salazar: “El presidente López Obrador tiene razón, tiene razón de decir “vamos a hacer cambios para lo mejor del pueblo” entonces este proceso que existe ahora, que el Presidente ha planteado, se deben entender las razones de él”
Declaración que de inmediato, causo molestia en algunos sectores del gobierno de Biden, pues tanto senadores demócratas, como la Secretaria de Energía, cuando visito México manifestó la preocupación de su gobierno al respecto, y las grandes corporaciones estadounidenses como: Chevron, Exxon, AES. Lo que provocó que uno de los diarios más influyentes de ese país, como lo es The Wall Street Journal, hablaran sobre la remoción del embajador de su cargo en México.
Acto seguido, declaraciones retractándose de lo dicho por Ken Salazar. A lo que siguió de inmediato la visita del ecologista John Kerry, quien conjuntamente con el canciller Marcelo Ebrard, emitieran un comunicado conjunto, diciendo que México y Estados Unidos impulsarían las energías limpias.
Como dice el refrán: el gozo de AMLO se le fue al pozo en materia eléctrica. La realidad es que las inversiones del vecino país del norte en materia energética aquí en México son muy importantes – sin referirnos a las de la Unión Europea- por lo que seguramente en pocas semanas, nos enteraremos de lo que sí, las inversiones extranjeras permitirán que en este aspecto pase en México. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes. [email protected]
