En lo que significó el punto final a su gira de supervisión por las refinerías de Petróleos Mexicanos en el país, está tarde, el presidente de México, Andrés Manuel López constató el reinicio de la construcción de la coquizadora en la refinería de Tula, Hidalgo. Se comprometió a que estará concluida a finales de 2023.
Acompañado por la secretaría de Energía, Rocío Nahle García; el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández; el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O y el director de Petróleos Mexicano, Octavio Romero Oropeza, el primer mandatario de la nación recordó cómo en 2017 Enrique Peña Nieto dejó en el olvido la construcción de esta obra, la cual hacía en acuerdo con la empresa Obredecht, misma que solo cobró por la edificación y dejó la obra en “ladrillos” y esperando a que se volviera chatarra Pat acéndrela así a privados.
En un mensaje en sus redes sociales tras el recorrido, destacó que la obra generará 8 mil empleos e impulsará la producción de 30 mil barriles adicionales de gasolinas.
“Con esta coquizadora vamos a tener los combustibles que demanda el mercado interno, es decir, ya no vamos a comprar las gasolinas en el extranjero”, enfatizó.La inversión para los trabajos, dijo, será de 60 mil millones de pesos, generoso también muchos empleos en la región, afectada como todo el país por el SARS CoV-2 que produce COVID-19.
También aprovechó el marco para pedirle a la titular de Energía, Rocío Nalhe, recordarle a todos cómo desde hace 7 años el entonces presidente Enrique Peña Nieto comenzó a supuestamente a construir la misma coquizadora pero llegada su reforma energética la abandonó.
Finalmente comprometió al ingeniero Ascensión Medina, director de proyectos de ICA Flúor a terminar esta planta ante de diciembre de 2023, a fin de garantizar el cumplir su compromiso de campaña de tener a inicios de 2024 todos los combustible producidos en territorio nacional.