En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Parkinson, que se celebra el 11 de abril, El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Sur dio a conocer que es una enfermedad degenerativa de mayor prevalencia en el adulto mayor, que provoca alteraciones básicamente en la función motora.
La detección oportuna, el estricto apego al tratamiento, una vez confirmado el diagnóstico y la aplicación de terapias físicas, contribuyen a que el paciente tenga una buena calidad de vida.
La especialista adscrita al servicio de neurología del Hospital General Regional (HGR) en Orizaba del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Maribel Ramírez Hernández, informó que el padecimiento afecta en promedio al 30 por ciento de la población mayor de 60 años de edad y, con mayor frecuencia a los varones.
Detalló que la enfermedad se caracteriza por temblor, torpeza al caminar y rigidez y síntomas no motores como estreñimiento crónico, mareos, alteraciones del sueño que causan insomnio y sonambulismo, éstos últimos pueden tener años por lo que el paciente se habitúa a ellos sin relacionarlos con esta enfermedad neurológica.
Explicó que debido al proceso de envejecimiento, a partir de los 60 años disminuye la generación de dopamina y otros neurotransmisores
“En algunas personas, esto es causal del parkinson y el riesgo aumenta cuando, derivado de actividades laborales se estuvo en contacto recurrente con pinturas y otros agentes químicos sin la protección debida, también quienes en la juventud presentaron migraña o cefaleas crónicas, tienen mayores probabilidades de desarrollar parkinson”, mencionó.
Destacó, que aunque la enfermedad no es curable, sí es controlable, y añadió que el tratamiento se basa en la prescripción de determinados fármacos y la recomendación de terapia física, así como habilitar condiciones de seguridad en el hogar, para que el paciente tenga donde sostenerse, por ejemplo barandales, barras en el sanitario y área de regadera.
Dijo que cuando el paciente tiene una red de apoyo, es más fácil el apego a su tratamiento, porque a diferencia de otras enfermedades neurológicas, el parkinson no afecta las funcione cognitivas, son de funcionalidad y físicas.
“La comprensión familiar es vital, ya que es común que derivado de la limitación y disminución de habilidades físicas, es alto el riesgo de que presenten cuadros depresivos, las terapias ocupaciones también son útiles”, consideró.
