Trece de los catorce partidos sentados en la mesa del Consejo General del Organismo Público Local Electoral (OPLE) se negaron a firmar un segundo acuerdo de civilidad para la jornada del seis de junio próximo. La propuesta la llevó a la mesa el partido Unidad Ciudadana, que dirige Cinthya Lobato Calderón.
En la sesión ordinaria del OPLE se presentó un acuerdo, que fue observado por todos los representantes de partidos políticos, incluso, el consejero presidente Alejandro Bonilla Bonilla consideró que el documento se tenía que nutrir con la participación de todos los institutos y no sólo a propuesta de uno.
La dirigente de Unidad Ciudadana Cinthya Lobato Calderón alertó la urgencia de que se signe un acuerdo pues en todos los partidos políticos se han presentado casos de candidatos que “dieron las gracias” a la postulación, pues han recibido amenazas.
Los representantes sentados en la mesa coincidieron que es constante la intimidación a los potenciales candidatos que ya se han retirado de la contienda, antes de empezar, sin embargo, dijeron, “con lo que está pasando el pacto se tendría que hacer con los delincuentes, y no creo que lo quieran hacer con nosotros”.
Incluso, se mencionó que la propuesta llegó tarde, dado que el 22 de marzo se firmó un acuerdo en la entidad a la que llegaron unos cuantos partidos, por lo que se consideró obsoleto y ocioso validar un segundo documento.
Lobato Calderón fue insistente en la necesidad de que el OPLE sea el órgano responsable de exigir condiciones de seguridad para todos los participantes, dado que Veracruz es el segundo estado con más violencia contra políticos, es necesario garantizar que las elecciones se darán en paz.
“Por eso pedimos que el OPLE sea quien haga el llamado al Estado y la Federación. Pedimos que se garantice la seguridad de los candidatos y para que la gente salga a votar, No hay peor ciego que el que no quiere ver”, reprochó la dirigente después de que no se apoyó su propuesta.
Ante los señalamientos de que los candidatos están renunciando, el Verde consideró que se trata de una excusa de los partidos de reciente creación o emergentes, que se quieren justificarse por la falta de cuadros.