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Conflicto entre taxistas con diferentes denominaciones

Por Luís Martínez Wolf

Barloventeando

Junto con mi esposa, el día de ayer aborde un taxi frente a mi casa en Av. F. Magón y Alacío Pérez, el recorrido hasta el rumbo del Mercado Hidalgo se realiza en aprox. cinco a diez minutos con el tránsito pesado, el cobro de la carrera es de 25 a 30 pesos, no pregunté el costo de la dejada, pero el conductor, un hombre de edad avanzada, de aprox. 60 años, me pidió precisar el rumbo donde iba, le respondí que a la altura de H. Cortez y Allende, se realizó el viaje en un carro destartalado, sin clima y con los asientos percudidos y rotos, al llegar a mi destino pregunté el precio del viaje y me respondió que eran 40 pesos, le hice saber que normalmente me cobran 30 pesos y me respondió que el cobraba por ese viaje 40 pesos, callé y le entregue un billete de 50 pesos, el conductor guardó el billete en su guantera y me hizo saber que no traía cambio, que debía pagar el importe preciso.

El asunto era de pleito, pero por ir acompañado con mi esposa callé y le deje los 50 pesos, un abuso fuera de orden, me dejo con agruras y pensando en la bronca que traen los taxistas con la empresa o agrupación de taxis UBER, ahora entiendo la razón por la que muchas personas defienden a la empresa llamada por los taxistas veracruzanos como PIRATAS del servicio, son competencia, pero si el servicio es semejante al de ayer, por mi parte que los dos grupos, taxistas veracruzanos y piratas se coman su pastel y ojala se indigesten como yo ayer.

Comentando el asunto con mi esposa me platicó que ella tiene la credencial o tarjeta para ser usada cuando necesita el servicio de taxi, me dejó asombrado por lo expuesto, va para que los taxistas como el de ayer, entiendan la razón por la cual muchos ciudadanos están a favor de que se autorice el servicio de UBER o como se llamen los piratas que compiten con los taxistas regulares de Veracruz:

Para uso del servicio UBER, debe el usuario obtener registro de la empresa, se le entrega una credencial que le acredita con los derechos de uso del servicio, los carros de UBER son casi de último modelo, tienen clima, un tablero donde se puede ver un mapa que muestra el recorrido del vehículo, el conductor está vestido impecable, limpio y atento al ser abordado el vehículo, ofrecen galletas o cacahuates, dan pormenores de su afiliación a UBER y muestran la tarjeta del vehículo, su marca y su afiliación a la empresa responsable, no cobran, pues el importe del viaje se carga a la tarjeta de crédito del usuario y tienen prohibido pedir o aceptar propina.

Después de conocer las particularidades del servicio, los taxistas que tratan de impedir la implantación del servicio UBER, deben cambiar de actitud, es triste, pero muchos conductores son explotados por flotilleros, políticos que en sus buenos días obtuvieron placas de varios vehículos y contratan choferes a quienes mal pagan, bien haria el Gobierno en autorizar a UBER, liquidar a los flotilleros a precio justo, e imponer un servicio como el que presta UBER, haciendo socios a los hoy explotados choferes de taxi. “AGUAS”

Diciembre 18 del 2020      [email protected]    Luis Martínez Wolf