Columnistas

La casa embrujada de Orizaba

Por Juan Iván Salomón

Cuentos, Mitos y Tradiciones

La semana pasada este escribidor y la Yaretzi López  viajamos a Orizaba y nos enseñaron una antigua casa abandonada que dicen está  embrujada. Nos pareció interesante la historia, la buscanos en internet y la encontramos. Ya nos habían comentado algo al respecto. A ver qué opinan, amigues lectores. Ahí va una somera síntesis de esta fascinante leyenda urbana:  

La casa está ubicada en las calles Sur 2 y Poniente 5, casi en la zona centro de la bella ciudad. Afirman que a quien se atreva a  pasar una noche completa adentro, se la regala el ayuntamiento orizabeño y también se comenta que aquellos que lo intentaron, se marearon, vomitaron, perdieron el sentido y amanecieron  dormidos en la calle sin recordar qué más ocurrió adentro.

Cuentan los vecinos que en el interior de la casa fueron asesinados  sus propietarios hace muchos años y que allí todavía moran los  fantasmas.

 ¿Se animan a entrar,  permanecer adentro toda una noche y luego convertirse en los dueños de la casa? Por si las dudas, nosotros… no.

DESEMPLEADOS DE NIVEL 

Mario Moya Palencia, quien fuera secretario de Gobernación y  considerado un potencial  presidenciable, no fue escogido como sucesor del presidente Luis Echeverría, y   cuentan sus amigos que tiempo después de entregar el cargo de secretario de Gobernación, Moya Palencia visitó al ya para entonces presidente de la república, José López Portillo.

–Pepe, ayúdame por favor. No tengo dinero y necesito trabajar –le suplicó a su amigo presidente. 

O sea, como en la vieja telenovela de Verónica Castro, “Los ricos también lloran”, los que alguna vez fueran altos  funcionarios públicos también sufren.

López Portillo lo nombró director general de FONATUR y asunto resuelto. Para algo es “el pinche poder” (Fidel Herrera dixit).