ALMA GRANDE
El ambiente tropical crea escenarios que parecieran producto de la fantasía; sin embargo, surgen de manera espontánea donde menos se le espera
Son los tiempos de los abuelos y las abuelitas, y como tema importante no se excluyen de la política en tiempos de campaña. Los protagonistas de nuestra política no dejan atrás a sus ancestros, los recuperan de la memoria y de su lento caminar por el tiempo.
Desde inicio del sexenio los abuelos se volvieron tema político, lo mismo como parte de las elecciones como de la esencia de los programas sociales. Ahora también son referencia de la vida pública del país.
El ambiente tropical crea escenarios que parecieran producto de la fantasía; sin embargo, surgen de manera espontánea donde menos se le espera.
En Veracruz salió a la vista de todos la situación de la abuela del propio gobernador, cuando trató de explicar éste que el exsubsecretario de Ingresos y Administración en la Secretaría de Finanzas, Eleazar Guerrero Pérez, no era su primo.
En una conferencia de prensa cuestionado sobre el tema, el gobernador le dijo a los periodistas que eso deberían averiguarlo, porque su abuela y ahí hubo un silencio, que cada quien interpreta a su manera, terminó diciendo que “los niños González y otros decidimos llamarnos primos…”.
Lo cierto es que Eleazar Guerrero manejó los dineros del estado y esto, asociado con un parentesco da mucho de qué hablar, así como la conducta y deshonestidad del primo incómodo. Eleazar ahora ya se colocó contra la candidata de Morena y asegura que no tiene el triunfo asegurado.
Pero no es la única abuela que surge de las diferencias partidistas en el México contemporáneo. En los debates que algunos desprecian y otros los vuelve adictos a este tipo de enfrentamientos, también salieron a relucir los abuelos. Nada menos que de la candidata de Morena, cuando quiso explicar las razones por las cuales supuestamente el nombre de su familia aparece en los Panamá Papers, diciendo que, en caso de existir, es producto de una herencia que sus abuelos dejaron a sus padres, como una manera de explicar pertenencias y posesiones.
La mutación antinatural de los debates que se convierten en una pelea de ver quién encuentra en el contrincante más errores y corruptelas, arroja como resultado un hartazgo de un espectáculo que seguramente se aclarará con las elecciones. Ahí se sabrá quién miente y quién dice la verdad. No hay quien desde que llega a la política sabe cómo nadar en aguas dulces y saladas de las verdades y las mentiras.
Lo que se hace urgentemente necesario en los debates es la exigencia de mayor respeto a la población con el objetivo de que pueda tener una idea muy clara de por quién votar, con la certeza de que se identifica con sus necesidades, inquietudes e intereses. El pueblo es sabio porque debe tener información real y decide porque tiene un criterio basado en la verdad.
Hay abuelos que no pueden olvidarse, como el del actual presidente municipal de Monterrey, quien compite por una Senaduría, Luis Donaldo Colosio Riojas, cuyo abuelo, Luis Colosio, fue designado Senador por el PRI, después del asesinato de su hijo.
El actual coordinador de asesores del presidente de la república, es Lázaro Cárdenas Batel, nieto de El Tata, Lázaro Cárdenas del Río.
Así, la herencia del talento o la adicción a vivir del presupuesto se vuelve parte de la historia de nuestro país donde la figura de los abuelos es muy importante. Aunque haya cotidianamente frases que pueden aplicarse a la más auténtica de las candidatas, como la de “No tiene abuela”.
PEGA Y CORRE. – La diversidad del pensamiento político suele ser una expresión muy limitada cuando existen sólo tres candidatos a la Presidencia de la República, un ejemplo de esta limitante es el hecho de que el primero de mayo habrá 19 marchas diferentes, cuyos integrantes festejarán a su manera y con sus propias reivindicaciones el Día del Trabajo…Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.