Opinión
A tres meses y días de que se lleve a cabo la jornada electoral, el próximo 2 de junio, el ambiente en general del país no es del todo de tranquilidad y menos de dulzura.
El próximo viernes 1 de marzo, es la fecha oficial del inicio de la campaña electoral para los contendientes por el cargo de Presidente de la República, que hasta el momento supuestamente está entre Xóchitl Gálvez por la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI y PRD) y Claudia Sheinbaum por la alianza Continuemos Haciendo Historia (Morena, PVEM y PT).
Contienda electoral que por el momento ha sido calificada como una elección de estado, por lo que corresponde al apoyo de Sheinbaum Pardo, debido al tiempo que lleva recorriendo el país y también a la cantidad de recursos que se ve está utilizando.
Pero independientemente de eso el trabajo que está llevando a cabo Gálvez Ruíz, en su recorrido por el país, quiéranlo o no aceptar sus detractores, la ha posicionado en un lugar envidiable de aceptación debido a su simpatía personal y a la veracidad de sus palabras en sus intervenciones.
Situación que ha llevado a reporteros a cuestionar a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), sobre el espinoso tema para él, de que si no ganara su corcholata que haría. Pregunta a la que escuetamente respondió: que reconocería el triunfo de cualquier candidato. Situación que todo México espera ver y escuchar con ansiedad, qué de darse, sería la continuación de la democracia en México, pero aun faltan tres meses y días para saber.
Pero lamentablemente el periodo de campaña electoral oficial que está por iniciar enfrenta varios problemas graves que las autoridades electorales como el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tienen que solventar.
Por una parte los problemas que tiene a su interior el INE de orden político y también administrativo, que de no resolverse en tiempo y forma, pueden llegar a afectar el desarrollo del Proceso Electoral, lo que para algunos de los participantes sería muy conveniente.
Aunque este no es el único problema, ya que al exterior de los organismos electorales está la grave situación que representa la delincuencia organizada por la forma que está interviniendo en el desarrollo del Proceso al presionar a aspirantes para que no participen y asesinar a otros sin importar las siglas partidistas a que pertenezcan. Lo que está demostrado con los 35 aspirantes asesinados de junio del pasado año 2023 a febrero del presente año.
Obviamente hay otras situaciones o calamidades, como se les quiera llamar que aquejan el Proceso Electoral, que esperemos por el bien de México y de todos no crezcan o que no aparezcan más. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes. [email protected]
