La salud, educación y seguridad son unas de las básicas tareas de toda autoridad frente y para con la población.
En la agenda de Veracruz en esa trilogía de conceptos y por todas las regiones – unas más o menos que otras, pero en todas – es una realidad que el regimen no solo ha quedado a deber sino que es más, va creciendo el desajuste en la atención y con ello, el mal humor social aumenta.
De los robos a instalaciones y planteles escolares ahora se ha sabido que existen actos ilícitos de vulnerabilidad a personas (alumnos y alumnas) en su salud e integridad, como los presuntos hechos de violación a una joven adolescente en Minatitlán, muy poco se sabe o dicho, pero es peor que no se atienda, pues la familia de la afectada se queja incluso del cuerpo de gobierno escolar por encubrimiento.
Durante el sexenio estatal se ha venido diciendo por este régimen actual que es mínimo el número de reportes que sufren de robo o algún otro tipo de violencia en escuelas, pero se sabe que en zonas urbanas y semiurbanas, rurales y serranas, hay maestras y maestros que buscan cambio de adscripción por inseguridad en sus entornos, y esa muestra de inseguridad ha ingresado a los planteles en lo material y ahora hasta en lo personal, e incluyendo a menores de edad y más alumnos.
Es un secreto a voces que hay docentes a quienes amenazan y extorsionan por varias regiones de Veracruz, y aunque pocos son quienes denuncian los hechos de manera judicial, quedando las quejas en escritorios de oficinas de autoridades administrativas institucionales y sindicatos, es bastante grave la desatención oficial.
Sin justificarse, pero tratando de entender que los dirigentes de casi todos los sindicatos lo saben y dicen, pero también es verdad que muchos no hacen denuncia formal para evitar exponerse a mayores efectos,
también creo que muy poco o casi nada está haciendo en ese orden el gobierno en conjunto, del estado de Veracruz.
La interrelación de la educación con la seguridad pública así como, con la procuración de justicia van de la mano, incluso organismos como el INE a través de la consulta infantil y juvenil en 2019 y el INEGI en la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana – segundo trimestre del 2023 – así como, en el Censo Nacional Agropecuario 2022 del mismo Inegi, nos reflejaron datos de inseguridad en zonas rurales y no sólo en el campo productivo de Veracruz.
Ojalá que en nuestra entidad, no se tengan sucesos como en otros estados, y en donde han tenido que suspender labores escolares, debido a desajustes sociales por la inseguridad en el entorno de profesores y alumnos o padres de familia, incluso.
Tarea urgente extra escolar para la SEV y Seguridad Pública,- por lo menos,- es el saber programar y replantear el combate a todos los hechos ilícitos en el entorno escolar y de manera integral.
DE SOBREMESA
Como parte del tema central abordado, cabe decir que la inseguridad también afecta a los propios inmuebles en escuelas, pues constantemente sufren robos, y sin descontar también que se extiende a los alumnos con el bullying que ejercen sus propios compañeros, y peor aún por la supuesta venta en los planteles – como recientemente se supo que en el Conalep en Atoyac – y esto, si se entreteje lleva a pensar que no pinta un buen panorama, incluso en el proceso electoral venidero, pues muchas casillas se instalan en escuelas y la SEV juega un papel de coadyuvante de la autoridad electoral, ¡ Ojo !
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
Y por cierto, el ex titular de la SEV Roberto Zenyazen Escobar García, y quién ha dicho será el designado a la candidatura de Morena a diputado federal por el distrito 16 con cabecera en la ciudad de Córdoba, ya veremos como lo califican los electores directos e indiretos del sector educación a través de las urnas.
UN LECHERO LIGHT
La violencia delictiva del entorno escolar – el profesorado y toda la comunidad de educandos – el gobierno de Veracruz deberá alejarlo de la inseguridad y los riesgos.
¡ ES CUANTO !