- Aterrizaje de emergencia y medidas de seguridad tras incidente en vuelo 1282
En un incidente impactante, un avión de Alaska Airlines, perteneciente a la flota Boeing 737-9, experimentó la pérdida de una ventana y parte de la pared lateral en pleno vuelo, dejando a 177 pasajeros a bordo en una situación de emergencia. La escena fue capturada en video por una pasajera, quien compartió el momento en las redes sociales.
Tras el reporte del incidente, la aerolínea tomó la decisión de inmovilizar temporalmente todos sus aviones Boeing 737-9 como medida preventiva. El video muestra el caos a bordo, con la ventana rota y máscaras de oxígeno colgando del techo mientras la aeronave realizaba un aterrizaje de emergencia en Portland, Oregón.
La pasajera que filmó el suceso compartió las impactantes imágenes en Instagram, donde se observa a los 171 pasajeros tranquilos en sus asientos durante el aterrizaje de emergencia del vuelo 1282, que originalmente se dirigía a Ontario, California. Fotografías tomadas desde el interior del avión revelaron el panel faltante después de tocar tierra de manera segura.
Análisis de las imágenes exteriores del avión sugiere que un panel, posiblemente utilizado como puerta de salida trasera, se separó durante el incidente, según informaron Flightradar24 y analistas de seguridad. La despresurización del avión está siendo investigada por la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, mientras que la Administración Federal de Aviación también se encuentra indagando el problema de presurización reportado por la tripulación.
En respuesta al suceso, Ben Minicucci, director de Alaska Airlines, anunció la decisión de dejar en tierra la flota de 65 aviones Boeing 737-9 como precaución. Afirmó que ninguna aeronave volverá a operar hasta que se hayan completado exhaustivas inspecciones de mantenimiento y seguridad, estimando que este proceso llevará varios días. El vuelo 1282, que despegó de Portland, tuvo que regresar poco después del despegue debido a un problema de presurización, según la FAA.
El pasajero Kyle Rinker, testigo del incidente, relató que la ventana estalló justo después del despegue. Con el avión certificado en octubre y Boeing colaborando con las investigaciones, la seguridad y el mantenimiento se han convertido en prioridades cruciales para abordar este preocupante episodio en los cielos.