En una declaración transmitida por cadena nacional, el presidente argentino Javier Milei reveló un ambicioso megadecreto compuesto por 366 artículos, destinado a impulsar la estabilidad y revitalizar la economía del país. Estas medidas, presentadas como parte de un extenso plan de desregulación económica, involucran la modificación de más de 30 leyes y más de 300 disposiciones normativas existentes.
El mandatario, rodeado por su gabinete gubernamental, grabó el anuncio pocas horas antes de que los ciudadanos salieran a las calles de Buenos Aires para expresar sus preocupaciones sobre la situación económica y cuestionar algunas de las decisiones iniciales de Milei, quien asumió la presidencia hace exactamente 10 días.
El decreto de necesidad y urgencia (DNU) presentado por Milei tiene como objetivo derogar leyes que considera obstáculos económicos. Entre las normativas que serán eliminadas destacan la Ley de Alquileres, la Ley de Góndolas, la de Promoción Industrial, y la que prohíbe la privatización de empresas públicas.
Adicionalmente, el presidente propone reformar el Código Aduanero para facilitar el comercio internacional, desregular los servicios de internet satelital y el sector turístico, y fomentar la competencia en la industria farmacéutica.
En el ámbito político opositor, existen divergencias sobre la viabilidad de derogar o reformar leyes mediante un decreto presidencial. Aunque un DNU puede implementar medidas de inmediato, su ratificación o rechazo por parte del Congreso sigue siendo un tema en debate.
El presidente Milei detalla, uno por uno, los aspectos clave de las 30 reformas propuestas, abarcando desde la derogación de leyes específicas hasta cambios en el régimen laboral, el Código Aduanero y la introducción de nuevas políticas en sectores como la medicina prepaga, el turismo y la tecnología. Este anuncio ha generado una amplia discusión y expectativa en el ámbito político y social argentino.