La región de Gaza nuevamente se sumió en la oscuridad de la violencia después de que concluyera la tregua mediada por Qatar y Egipto, con Israel reanudando sus ataques aéreos y de artillería. La situación se tornó aún más intensa con enfrentamientos feroces entre las tropas israelíes y los combatientes palestinos en la ciudad de Gaza. Este reinicio hostil sigue a la liberación de ocho rehenes por parte de Hamas, incluida Ilana Gritzewsky Camhi, una ciudadana mexicana-israelí, a cambio de 30 prisioneros palestinos entregados por Israel.
El contexto de este conflicto se desarrolló en un período de tregua que duró una semana, durante la cual más de 100 rehenes, en su mayoría mujeres y niños, fueron liberados. A pesar de las expectativas de una extensión, las negociaciones se complicaron debido a la escasez de rehenes restantes en Gaza. Aunque Qatar y Egipto intentaron prolongar la tregua por dos días adicionales, la situación se tornó crítica con la reanudación de los ataques israelíes.
Estados Unidos, en este contexto, instó a Israel a actuar de acuerdo con el derecho internacional humanitario, enfatizando la necesidad de proteger a los civiles palestinos durante las operaciones militares. El secretario del Estado estadounidense, Antony Blinken, expresó su esperanza de que el alto el fuego pudiera ampliarse, liberando así a más rehenes. También mantuvo un encuentro con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, donde reafirmó el compromiso de su gobierno para tomar medidas tangibles en favor de un Estado palestino.
La reactivación del conflicto se desató después de que Israel detectó lanzamientos de cohetes desde Gaza hacia su territorio, atribuyendo la ruptura de la tregua a Hamas. La situación se volvió más compleja con la realización de ataques aéreos en el sur de Gaza, bombardeos de artillería en Jan Yunis y Rafá, y tanques operando cerca de los campos de refugiados de Nuseirat y Bureij.
Este episodio de hostilidades subraya la fragilidad de la situación en la región, mientras se busca un delicado equilibrio entre los intereses de las partes involucradas y las llamadas a la protección de la población civil en medio de la escalada de tensiones.