Hay partidos que pueden resistir desbandadas masivas y otros que deben cuidar a cada uno de sus militantes, a pesar de ser el eslabón más débil de la cadena opositora. De los tres partidos que conforman el Frente Amplio por México, PRI, PRD y PAN, los dos primeros han sufrido importantes salidas de sus integrantes, no siempre con un destino partidista previsto sino como muestra por la inconformidad con los métodos de selección de los candidatos, que, en realidad no hay métodos.
Del PRI han salido recientemente dos cuadros importantes como Alejandro Murat, ex gobernador de Oaxaca, y junto con él, su esposa, su padre y seguramente los integrantes de su equipo cercano. Lo mismo sucede con Adrián Ruvalcava, quien sale del tricolor para mostrar la traición del dirigente nacional, Alejandro Moreno, quien permitió que la candidatura a la Jefatura de Gobierno de la capital, fuera encabezado por un panista, en este caso Santiago Taboada.
Santiago Taboada está vinculado, por lo menos hasta las investigaciones ahora realizadas, con el cártel inmobiliario, con más de 60 edificios requisados por alteraciones en el método de construcción, que tiene su sede en la alcaldía Benito Juárez, pero que se extiende a otras delegaciones como Miguel Hidalgo y Álvaro Obregón. En periodos de gobierno encabezados por panistas.
La promesa de Alejandro Moreno, a Adrián Ruvalcava, era colocarlo como candidato de la alianza opositora; sin embargo, se dejó dominar por los deseos del líder nacional del PAN; Marko Cortés, quien, en nombre de la representación de ser la segunda fuerza electoral, quiere dominar todo y a todos dentro de la alianza.
En realidad, el rival más débil es el PAN, ya que tiene una crisis de militancia que está a punto de perder el registro por falta de miembros. Todavía está fresca la memoria de muchos mexicanos que se quedaron a la mitad del camino en el proceso de incorporación a la militancia panista, debido a que eran muchos los requisitos para integrarse a ese partido.
Ahora recogen partidarios sin ninguna condición, ahí está el ejemplo de Lucy Meza, a quien Morena le negó su derecho a participar en la encuesta para ser precandidata a la gubernatura de Morelos por sus nexos con delincuentes y funcionarios corruptos de la entidad, comprobados en videos y confirmados por los medios. Ante esta realidad, el PAN la recibió, y de inmediato la convirtió en su candidata a la gubernatura por ese partido.
La reciente salida del ex gobernador de Chihuahua, Javier Corral, luego de una militancia de 41 años, deja a su partido en la orfandad en esa entidad porque junto con él salen del PAN varios militantes que son pocos, dejan sola a la gobernadora Maru Campos, quien ha dado muestras de intolerancia con sus paisanos y llegado a la represión, anunciando que éste podría ser el último periodo del PAN gobernando el estado.
Javier Corral fue senador dos veces, diputado federal dos veces, quien sostiene que la formación política, surgida el siglo pasado como alternativa al proyecto hegemónico del PRI, ha abandonado sus principios de combatir la corrupción y abrir camino a la participación ciudadana en la toma de decisiones. Considera que la alianza electoral del PAN con el PRI en el Frente Amplio por México, aunque “no tiene ninguna posibilidad de ganar la presidencia de la República”, es la negación del espíritu con el que nació el partido en 1939.
En cuanto al PRD su salida daña, en gran medida, al frente en la Ciudad de México, porque en la entidad, esos 65 mil militantes, encabezados por Víctor Hugo Romo, ex delegado de Gustavo A. Madero, le representan al Frente casi 150 mil votos, que le son esenciales para ganar algunas alcaldías, principalmente en esa circunscripción.
David Nava, quien era presidente de ese partido en Iztacalco, mencionó que la salida de tantos militantes mete en una situación crítica al partido, pues en la elección pasada recabaron 140 mil votos a favor de la alianza opositora, además de que esa cantidad de sufragios son indispensables para alcanzar el 3 por ciento mínimo de votación.
El ex secretario de gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, anunció que seguirán las desbandadas en el PRI, porque el descontento crece con el liderazgo de Alejandro Moreno, quien sólo busca una estrategia donde pueda beneficiarse él en lo personal con la designación de candidatos, conducta que pone en riesgo la unidad del Frente Amplio por México en todo momento.
Movimiento Ciudadano y Morena parecen estar alejados de las desbandadas por el momento. En el primero, Samuel García cierra filas con su partido al nombrar al diputado Jorge Álvarez Maynez, como coordinador de su campaña a la Presidencia de la República, lo cual significa que deja a un lado a su equipo de funcionarios públicos que lo acompañó durante los últimos años en el Palacio de Gobierno de Nuevo León para sumar fuerzas con Movimiento Ciudadano y cerrar las posibles heridas que dejara su designación, con lo que se consolida, también, el liderazgo de Dante Delgado, quien va por el segundo lugar electoral.
En Morena, el único factor de disidencia parece subsanado, al integrarse Marcelo Ebrard a la campaña de Clara Brugada a la jefatura de gobierno, y asesorar a la ex alcaldesa de Iztapalapa en cuestiones electorales.
De todas maneras, nadie puede asegurar que algún partido, de las tres opciones políticas que existen, esté a salvo de una enorme desbandada, y, en el caso del PAN, una salida mortal que pudiera causarle el retiro de más de 30 mil militantes, por las mismas causas que el PRI, al tener un liderazgo partidista débil y con intereses personales muy marcados en tiempos electorales.
Los procesos de selección interna se han reducido a dedazos en la mayoría de los partidos políticos, a pesar de que el INE recomienda ciertas reglas como el respeto a la equidad sustantiva de género, que tiene que ver con la misma cantidad de hombres que mujeres. Hay partidos que carecen de cuadros para cumplir con esta regla y otros que todavía se resisten a la equidad de posibilidades entre hombres y mujeres, a pesar de que los tiempos dictan espacios iguales para todos.
PEGA Y CORRE.- El INE destacó que durante este periodo que comienza el 20 de noviembre y concluye el 18 de enero próximo, se debe cumplir con una serie de procedimientos para dar certeza al proceso electoral, hacer posible la competencia equitativa y, por tanto, dar paso al voto libre e informado de toda la ciudadanía. Convocó a todos los actores políticos a conducirse con legalidad, reivindicar el pluralismo, la inclusión y la tolerancia, y a erradicar todo tipo violencia, sobre todo en contra de las mujeres…
