Islandia se encuentra en vilo ante la posibilidad de una erupción volcánica, generando inquietud tanto a nivel local como turístico. Más de 3000 residentes de un pequeño pueblo pesquero evacuados el sábado se esfuerzan por recuperar sus pertenencias con la asistencia de equipos de emergencia. Jon Thor Viglundsson, portavoz del Departamento de Protección Civil y Gestión de Emergencias de Islandia, expresó su esperanza de que la naturaleza permita este tiempo para la recuperación de objetos valiosos.
La Oficina Meteorológica de Islandia advierte sobre una “probabilidad significativa de erupción volcánica en los próximos días”, señalando la persistente actividad sísmica en la península de Reykjanes desde finales de octubre, con hasta 1400 terremotos en un solo día. Grindavik ha sufrido hundimientos y daños estructurales, y el popular balneario geotérmico de la Laguna Azul cerró como precaución, extendiendo su cierre hasta el 30 de noviembre.
La incertidumbre persiste sobre cuándo ocurrirá la erupción, aunque las autoridades indican que podría ser una cuestión de días. Aunque la actividad sísmica ha disminuido ligeramente, se mantiene, y las autoridades enfatizan que, aunque la erupción podría ser significativa, su impacto sería localizado en Grindavik, sin evacuaciones adicionales.
Islandia, con su historial de actividad volcánica debido a su ubicación sobre dos placas tectónicas, recuerda la erupción del volcán Eyjafjallajökull en 2010, que paralizó el tráfico aéreo en Europa. Sin embargo, el gobierno actual asegura que es poco probable que esta erupción cause interrupciones significativas en el transporte aéreo, señalando que las rutas internacionales siguen abiertas, aunque se mantiene una alerta naranja.
En cuanto a los viajeros, se aconseja verificar las pólizas de seguro de viaje, ya que la cobertura generalmente se aplica si se contrató antes de la divulgación pública de la erupción. Además, se destaca que los derechos de los pasajeros de la Unión Europea también se aplican en Islandia.
Para obtener información actualizada, la Oficina Meteorológica de Islandia monitorea la situación en tiempo real, especialmente cerca de Grindavik, y un sitio web transmite en directo desde varias zonas del país, brindando detalles sobre la actividad volcánica.