Según informes, Estados Unidos anunció el jueves que Israel ha accedido a implementar “pausas humanitarias” de cuatro horas diarias en el norte de Gaza para facilitar la evacuación de civiles. Durante estas pausas, se afirmó que no habrá operaciones militares por parte de Israel, aunque persisten preocupaciones sobre posibles obstáculos por parte de Hamas para la salida segura de los civiles.
Se hizo un llamado a los civiles para que busquen refugio en zonas seguras, mientras se destacó la importancia crucial de proporcionar asistencia humanitaria en las áreas a las que se desplazan. Aunque se reconoció el ingreso reciente de camiones de ayuda en el sur de Gaza, se expresó la necesidad de un aumento sustancial en la cantidad de asistencia humanitaria proporcionada.
El portavoz de la Casa Blanca resaltó los desafíos que enfrenta Israel al lidiar con milicias que se escudan entre la población civil, y subrayó la importancia de cumplir con las normas internacionales mientras se permite que los civiles accedan a zonas más seguras durante estas pausas humanitarias.
En cuanto a posibles acuerdos más amplios, se indicó que Estados Unidos continúa trabajando con aliados regionales para la liberación de rehenes, y se consideró que las pausas podrían ser beneficiosas para asegurar su liberación segura.
Se subrayó la implicación directa del presidente estadounidense, Joe Biden, y otros funcionarios clave en las conversaciones con Israel que condujeron a estas decisiones. Además, se reafirmó la postura de Estados Unidos sobre la necesidad de permitir al pueblo palestino determinar su futuro y su gobierno, con la participación de la Autoridad Nacional Palestina en dicho proceso.