Tras el impacto devastador del huracán Otis en la costa de Acapulco, Guerrero, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México informó el domingo 29 de octubre que un total de 263 personas provenientes de 15 países diferentes, entre ellos Alemania, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, España, Japón, Perú, Suiza, Bélgica, Costa Rica, Cuba, Estados Unidos, Francia y Reino Unido, fueron localizadas y evacuadas de la zona.
La SRE detalló que estas operaciones se llevaron a cabo en respuesta a las solicitudes de ayuda de los respectivos países, con el objetivo de localizar y asegurar la seguridad de sus ciudadanos afectados por la catástrofe. Se confirmó que un primer grupo de 187 personas de diversas nacionalidades había sido localizado y trasladado de la zona afectada, mientras que un segundo grupo, compuesto por 76 personas adicionales, también fue rescatado de Acapulco hasta la tarde del domingo.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su compromiso de reactivar la actividad económica y turística en Acapulco, y convocó a representantes del sector empresarial y bancario para trabajar conjuntamente en la recuperación de la región, con un enfoque particular en la reconstrucción y asistencia a los sectores más vulnerables y necesitados de la población.
En medio de la devastación, alrededor de 10 mil efectivos de las fuerzas armadas y la Guardia Nacional se han movilizado para restaurar el orden y proporcionar ayuda urgente a una población desesperada y afectada por la falta de recursos básicos, como agua, alimentos, electricidad, telecomunicaciones y combustible. El huracán Otis, que rápidamente pasó de tormenta tropical a huracán de categoría 5 en un lapso de 12 horas, se ha convertido en uno de los ciclones más poderosos registrados en la historia del océano Pacífico.