La Asamblea General de las Naciones Unidas llevó a cabo una sesión este viernes en la que se aprobó una resolución de vital importancia, con la destacable excepción del voto en contra por parte de Estados Unidos. El documento no vinculante enfatiza la necesidad urgente de establecer una “tregua humanitaria inmediata y duradera” en la conflictiva región de la Franja de Gaza. Además, insta con vehemencia a la garantía del acceso sin obstáculos para la distribución de ayuda humanitaria esencial, incluyendo alimentos y servicios vitales, a la población civil gravemente afectada por los recientes acontecimientos.
La propuesta de resolución, presentada por Jordania, logró una considerable mayoría de apoyo, con 120 votos a favor, mientras que 14 países optaron por expresar su oposición directa y otros 45 se abstuvieron durante la votación. Es de destacar que la resolución se abstiene de señalar directamente a Hamás o a Israel, los principales actores en el conflicto, lo que ha generado diversas reacciones y controversias en el ámbito internacional.
Previamente, durante la sesión, Canadá propuso una enmienda con la intención de condenar expresamente a Hamás por los ataques perpetrados el 7 de octubre, los cuales tuvieron como resultado la lamentable pérdida de más de 1.400 ciudadanos israelíes, la mayoría de ellos civiles. Sin embargo, esta enmienda fue rechazada en el contexto de la resolución general, lo que ha generado aún más debate y atención en torno a la situación en la región y la necesidad de acciones concretas y colaborativas para mitigar la crisis humanitaria en curso.