La compañía fabricante de una fritura extrapiante conocida como “One Chip Challenge” y popularizada como un desafío en las redes sociales ha retirado el producto del mercado después de que la familia de un adolescente en Massachusetts atribuyera su muerte al desafío.
Harris Wolobah, un joven de 14 años, falleció recientemente, y aunque la causa exacta aún no se ha determinado y la necropsia está pendiente, la familia cree que el desafío fue responsable de su muerte.
La empresa Paqui, con sede en Texas, ha solicitado que las tiendas retiren las frituras empacadas individualmente de los estantes, una medida que ya implementó la cadena 7-Eleven.
La “One Chip Challenge” se vende por aproximadamente 10 dólares y viene en un paquete que se asemeja a un ataúd. El empaque advierte que la fritura está destinada al “vengativo placer del picor y el dolor intenso” y está dirigida a adultos, por lo que debe mantenerse fuera del alcance de los niños.
En respuesta a la muerte de Wolobah, Paqui publicó un comunicado en su sitio web lamentando profundamente el incidente. La empresa señaló que ha habido un aumento en el número de adolescentes y otras personas que no respetan las advertencias del producto.
Las autoridades en Massachusetts también han emitido advertencias a los padres sobre este desafío, que se ha vuelto popular en redes sociales como TikTok. Numerosas personas, incluidos niños, han publicado videos en los que se les ve abriendo el paquete, comiendo la fritura y mostrando sus reacciones. Algunos experimentan náuseas, tos y suplican agua.
En todo el país, ha habido informes de personas que enfermaron después de realizar este desafío, incluyendo tres estudiantes de una escuela secundaria en California que fueron hospitalizados. Además, el año pasado, se requirió la presencia de paramédicos en una escuela de Minnesota después de que siete estudiantes enfermaran después de intentar el desafío.
Los síntomas asociados con el consumo de estas frituras van desde una sensación de ardor en los labios hasta síntomas más graves como dolor abdominal, náuseas y vómitos. Los expertos señalan que los ingredientes utilizados en estas frituras, como la capsaicina, pueden ser peligrosos en ciertas circunstancias y en dosis altas pueden provocar daños en el corazón.
Este incidente ha generado una conversación importante sobre la seguridad de los desafíos virales en las redes sociales y la responsabilidad de los fabricantes al comercializar productos extremadamente picantes. Además, ha enfocado la atención en la necesidad de educar a los jóvenes sobre los peligros potenciales de participar en tales desafíos.
