O P I N I O N
El periodo de sesiones que inició el pasado viernes uno de septiembre en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, además de haber sido prácticamente el primer acto de campaña de Xóchitl Gálvez, también sirvió para que la titular de la Secretaría de Gobernación Luisa María Alcalde anunciara las cuatro iniciativas que el Ejecutivo Federal mandaría durante el presente periodo.
Iniciativas que no son nuevas, ya que algunas son las que no ha podido la inexplicada 4T lograr su aprobación en los periodos pasados: militarizar la Guardia Nacional; bajar la edad a 65 años de los adultos mayores para que sean acreedores con la pensión universal; ampliar estos derechos a las personas con alguna discapacidad y elevar a rango constitucional el Programa Sembrando Vida.
Temas que algunos de ellos seguramente causaran las enconadas discusiones que ya causaron en los periodos de sesiones anteriores cuando fueron abordados y que no se sabe si en esta ocasión serán aprobados, pero otros que por la importancia y beneficios que aportan a algunos sectores de la población seguramente lo serán.
Pero independientemente de las iniciativas citadas también inicia este mes de septiembre con la amenaza por un lado de la arbitraria y equivocada instrucción del Gobierno Federal de bajar el número de operaciones del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) de 52 a 43 por hora, lo que significa una reducción aproximada más de 200 despegues y aterrizajes por día, lo que semanalmente sería una reducción aproximada de 1400 operaciones a partir del próximo mes de octubre, lo que afectaría a aproximadamente un millón y medio de pasajeros durante los meses de noviembre y diciembre que es la temporada de fin de año que tiene una gran afluencia de viajeros.
Por lo que toca a las líneas aéreas nacionales e internacionales las afectaciones también serán graves principalmente en el aspecto operacional nacional e internacional, además de los costos que la medida ocasionará, afectando tanto a las compañías aéreas teniendo que elevar el precio del pasaje lo que sin duda alguna afectará a los viajeros.
Por lo que la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la Asociación Latinoamericana de Transporte Aéreo (ALTA), la Cámara Nacional de Aerotransporte (Canaero), el Colegio de Pilotos de México y algunas líneas aéreas nacionales, han expresado su desaprobación con la arbitraria medida que debió haberse tomado con la participación de los afectados y sobre todo por especialista en la materia.
Acciones que se nota fueron evitadas por las autoridades del Gobierno Federal, ya que los principales problemas que presenta el AICM, no solamente es su saturación, aunque tiene capacidad oficial para trabajar con 61 operaciones por hora, sino su deterioro por falta de mantenimiento.
Actitud que denota se trata de hacer inoperante al Aeropuerto Internacional Benito Juárez o de la CDMX, con la intención de como se pueda lograr que haya vuelos en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), lo que a más de un año de haberse puesto en operación no han logrado tanto por los problemas técnicos que representa para las compañías aéreas, como por su pésima ubicación con relación a la Ciudad de México.
Pero independientemente de los problemas señalados hay otro que puede considerarse como el más grave, la queja que ante el T-MEC seguramente interpondrán la compañías aéreas internacionales por los daños operacionales y económicos que la arbitraria medida les causará, acción que sumada a la del panel de controversia que todo indica a la brevedad iniciará por la actitud del Gobierno de México en contra de la compra del maíz transgénico, además de la solicitud que hay de parte de las empresas productoras de energía norteamericanas por también ir a un panel de controversias en esta materia, el inicio del próximo año 2024, año muy importante desde el punto de vista electoral para el país, será muy negativo para la administración de la 4T. Por las acciones citadas, pero que ellos provocaron. Usted qué OPINA, estimado lector. Hasta el viernes.