El domingo, Ecuador fue sacudido por un acto de violencia sin precedentes que cobró la vida del alcalde de la ciudad de Manta, Agustín Intriago, y de una joven deportista, Ariana Chancay. El presidente Guillermo Lasso confirmó la noticia a través de su cuenta de Twitter y expresó su conmoción por los trágicos acontecimientos, prometiendo que su gobierno tomaría medidas para capturar a los responsables.
Agustín Intriago, de 38 años y reelecto como alcalde en febrero de ese año, se encontraba realizando una inspección de obras en la ciudad cuando ocurrió el atentado. Según informes de la policía, una camioneta aparentemente involucrada en el ataque fue encontrada con una granada en su interior. Además, cerca del lugar del incidente, se halló un fusil que posiblemente fue utilizado en el acto violento.
El caso ha generado una profunda consternación en el país, y las autoridades están dedicando todos los recursos disponibles para dar con los responsables y llevarlos ante la justicia. La situación es aún más alarmante debido al contexto de creciente violencia que enfrenta Ecuador, con el gobierno atribuyendo estos actos a la disputa entre bandas criminales por el control del tráfico de drogas en la región.
La comunidad local está conmocionada por la pérdida de Agustín Intriago, un alcalde activo y comprometido con su ciudad, así como por la trágica muerte de la joven deportista Ariana Chancay, quien estaba presente en el evento público donde ocurrió el atentado.
El país se encuentra en estado de alerta y las fuerzas de seguridad están trabajando arduamente para investigar el caso y brindar seguridad a la población. Mientras tanto, la nación enfrenta el desafío de frenar esta creciente ola de violencia que amenaza la tranquilidad de sus ciudadanos y la estabilidad de la región.