En un correo electrónico filtrado, un agente de la policía fronteriza de Texas detalla medidas extremas adoptadas en el marco de la operación Lone Star, la cual es parte de la iniciativa de seguridad fronteriza liderada por el gobernador Greg Abbott. Según el correo, los agentes recibieron órdenes de empujar a niños pequeños y bebés lactantes migrantes hacia el río Bravo y se les prohibió ofrecerles agua, incluso en condiciones de calor extremo. La oficina del gobernador Abbott negó que esta operación ponga en peligro la vida de los migrantes.
El agente Nicholas Wingate informó en el correo que, el 25 de junio, se encontró con un grupo de 120 migrantes, incluyendo niños y madres amamantando, en el condado fronterizo de Maverick, Texas. Él y otro agente recibieron instrucciones de empujar a las personas de regreso al agua para que regresaran a México. Algunos migrantes sufrieron heridas por el alambre de púas colocado en la zona.
El Departamento de Seguridad de Texas está investigando internamente los relatos proporcionados por el agente, pero afirmó que no tienen directrices ni políticas que indiquen que los agentes no deben dar agua a los migrantes o empujarlos de regreso al río.
La operación Lone Star, que ha sido objeto de controversia, ha sido autorizada con un presupuesto de más de 4 mil millones de dólares. Incluye la colocación de una barrera flotante en el río Bravo, así como el traslado en autobús de migrantes a ciudades con gobiernos demócratas y el arresto de indocumentados bajo cargos de invasión de propiedad privada.
El relato del agente ha generado preocupación y enojo, y los demócratas del Capitolio de Texas han manifestado su intención de abrir una investigación al respecto.
La Casa Blanca condenó las acciones reportadas, calificándolas como horrendas y peligrosas. El Departamento de Seguridad Nacional también condenó las acciones, pero no se ha confirmado si la agencia planea abrir una investigación.
Mientras aumentan las preocupaciones por el trato a los migrantes en la frontera de Texas, la oficina del gobernador Abbott emitió un comunicado negando que se haya dado alguna orden que ponga en riesgo las vidas de quienes intentan cruzar la frontera sin documentos. El comunicado defendió la misión fronteriza, aunque no abordó las declaraciones de Wingate sobre los migrantes que sufrieron heridas a causa del alambre de púas.