Prosa aprisa
Como prolegómeno a la entrada en la recta final de su gobierno, en la que irá en descenso en forma cada vez más vertiginosa, el próximo sábado habrá un mega acarreo nacional para glorificar a Andrés Manuel López Obrador al cumplirse el quinto año de la elección en que obtuvo el triunfo que lo llevó a la presidencia de la república.
Organizadores de la movilización de miles de trabajadores de las dependencias del gobierno estatal confirmaron al columnista que desde la semana pasada ya no hay en el estado autobuses disponibles para llevar contingentes, pues hubo quienes con mucha rapidez acapararon los más que pudieron.
El miércoles pasado el presidente convocó al Palacio Nacional a todos los gobernadores de Morena, entre ellos Cuitláhuac García Jiménez, para instruirlos a que envíen al Zócalo el mayor número de personas que puedan, pues pretende un lleno histórico, y aunque estarán los aspirantes a sucederlo, todos tienen la orden de no llamar la atención porque el único protagonista será él.
Según tienen planeado, se irán a temprana hora de diversas ciudades del estadopara llegar con mucha anticipación a la plancha del Zócalo a fin de ganar los mejores espacios, estarán en el acto que será en la tarde y luego se quedarán al festival. Calculan salir de regreso a la media noche para llegar en las primeras horas del domingo a sus lugares de origen.
Por la información que tiene el columnista, López Obrador sacará el priista que lleva dentro (fue dirigente estatal del PRI en Tabasco y hasta le compuso un himno a ese partido) y, como en los viejos tiempos del tricolor, para él este quinto y penúltimo año en el poder de hecho es el último que tiene para poder glorificarse, ya que el próximo, cuando concluya su sexenio, toda la atención estará puesta en quien para entonces será ya el presidente electo de la república.
Una práctica similar fue la que realizó Rafael Hernández Ochoa en 1979 cuando al cumplirse el quinto y penúltimo año de su gobierno realizó un acarreo (le llamaban entonces “concentración”) para su quinto informe que no solo rellenó el Estadio Xalapeño sino toda la zona universitaria y desquició la vida de Xalapa. Para ese efecto contrataron los 2 mil camiones disponibles que había en Veracruz y 500 más en Puebla y el Estado de México, e incluso a muchos los trajeron del puerto jarocho en tren, que en ese entonces existía (el operador de toda la movilización fue el entonces jovencito dirigente estatal del PRI, Gonzalo Morgado Huesca; este columnista ya era entonces reportero del Diario de Xalapa).
A estas alturas ya no es noticia ni novedad decir que hay molestia en miles de trabajadores a los que no solo los están obligando a asistir con la amenaza de que si no lo hacen los van a despedir de sus trabajos, sino que además tendrán que cooperar para el pago de las unidades y tienen que pagarse ellos mismos sus alimentos. Pero será una concentración histórica.
Hay nerviosismo en el cuitlahuismo porque Sheinbaum no levanta
Apenas llevan una semana las campañas de los aspirantes presidenciales de Morena y en el palacio de gobierno de Xalapa ya hay mucho nerviosismo porque su candidata Claudia Sheinbaum no está teniendo el éxito que esperaban.
Como lo vienen mostrando videos en las redes sociales de reporteros que cubren sus actividades, se están repitiendo los casos en que trabajadores tienen que retirar cientos de sillas de auditorios o plazas públicas donde celebra sus actos, pues la gente no asiste.
Fuentes locales con acceso al gobierno cuitlahuista han dicho al columnista que adentro es notorio el nerviosismo que los invade y que incluso se escuchan ya comentarios sobre la necesidad de ir previendo un Plan B, esto es, con quién van a jalar si su candidata no crece.
Y Sergio barre en Minatitlán a Nahle
Para colmo de ellos, el acto alterno que le organizaron el sábado en Minatitlán a su candidata a la gubernatura Rocío Nahle, para hacerle la maldad al aspirante Sergio Gutiérrez Luna, quien también organizó otro acto con motivo del día del padre en la misma ciudad, resultó un verdadero fracaso.
El diputado federal organizó un festival en una colonia por la tarde. Cuando los otros se enteraron, se inventaron un acto que llamaron “Cierre del proyecto de eficiencia y sustentabilidad energética de alumbrado público en Minatitlán, Veracruz”, que tuvo lugar tres horas después en el malecón ribereño.
Pero mientras que el aspirante oriundo de esa ciudad reunió a miles, la zacatecana congregó solo a unos cuantos, no obstante que la alcaldesa Carmen Medel Palma presumió que tenían invitados especiales de todo el sur del estado.
Fue tanto el vacío que le hicieron a la señora Nahle que sus operadores de prensa y redes sociales no se atrevieron a publicar una sola foto que diera idea de la cantidad de personas que la acompañaron, simple y sencillamente porque fueron muy pocas. Las únicas gráficas que dieron a conocer fueron donde se ve sola en un estrado y en compañía de la presidenta municipal. Nada más.
Pronto vendrá Sheinbaum a hacer campaña en Veracruz
En el gobierno del estado preparan ya la visita de su candidata presidencial Claudia Sheinbaum. Van a buscar la forma de que no se vea la mano que mece la cuna, pero desde ahora se están haciendo notar. No van a escatimar recursos. Por supuesto, no le confiarán alguna organización a los alcaldes de Coatzacoalcos, Amado Cruz Malpica; de Minatitlán, Carmen Medel Palma; y al de Tuxpan, José Manuel Pozos Castro. A los tres los tienen ya fichados como ineficientes para la movilización de cuadros de Morena.
Figuras de la oposición se abren y dejan el camino libre a Morena
Si de por sí se ve difícil que la oposición encuentre una figura competitiva que aspire a la Presidencia para 2024, la retirada de figuras anunciada ayer lo único que va a provocar será desaliento, lo que consolidará la seguridad de que Morena repita en el próximo sexenio.
Ayer el gobernador de Yucatán Mauricio Vila anunció que prefiere quedarse a terminar su sexenio, mientras que Germán Martínez, senador independiente, figura relevante, criticó el modelo aprobado por el Frente Amplio va por México (PAN-PRI-PRD). A su vez, Sergio Aguayo, otra destacada figura, renunció al Consejo Electoral Ciudadano del citado Frente, inconforme también porque, dijo, los ciudadanos sin partido quedan sometidos a las reglas y voluntad de los citados partidos, de una “partidocracia que monopoliza y empobrece la vida pública”.
Cuando apenas empieza el proceso selectivo de la oposición se dan ya retiradas de quienes tienen algo que aportar y darían certeza y confianza a las acciones que se realizarán, lo que no es determinante por ahora pero sí podría conducir a un fracaso anticipado del frente opositor y a una derrota segura en 2024.
Según lo que escucho en la plaza pública, a ras de suelo, las decisiones de inconformidad que empiezan a aparecer al único que van a beneficiar va a ser a Marcelo Ebrard, a quien la población civil que no es de Morena ve como la mejor opción de cambio para enderezar el rumbo del país, como el más y mejor preparado para gobernar y quien más simpatía despierta.
“Alito”, Marko y Zambrano, tres verdaderas “fichitas”
La oposición va mal a partir de que la encabezan tres verdaderas “fichitas”, figuras verdaderamente repudiables como el tal “Alito” Alejandro Moreno, del PRI, quien luego de todas las pillerías que le han exhibido debiera estar en prisión, pero se aferra al poder, sirve de moneda de cambio para negociar con Morena, Marko Cortés es otro y del tal “Chucho” Zambrano no vale la pena decir cualquier cosa.
Insisto en que la única opción que va quedando es la de Movimiento Ciudadano y eso si encuentra y postula un buen candidato, aunque va a ser difícil que pueda competir con la maquinaria guinda.
Luego de las retiradas ayer de Mauricio Vila, Germán Martínez y Sergio Aguayo, el presidente López Obrador tendrá motivos para empezar a festejar el quinto aniversario de su llegada al poder y el casi seguro triunfo de Morena en 2024.