CAFÉ DE MAÑANA
Sin intentar ser catastrofista con el enfoque del tema, el maíz; parece desgranarse y el precio de la tortilla; dispararse, y ambos a una velocidad máxima en contra de la estabilidad económica y del presupuesto en los hogares.
En México se tienen reconocidas más de 80 variedades de maíz, y desafortunadamente cada vez se cultiva menos en todas ellas. Las razones son diversas y dispersas, porque además debe saberse que existen productos agrícolas más rentables y productivos.
El INEGI –luego del Censo Nacional Agropecuario 2022– nos sorprendió con información a la baja en la producción del campo en varios conceptos, incluso en nuestra entidad, que históricamente había sido ariete y referente nacional como productor de maíz, entre otros productos. En Veracruz el promedio por hectárea es de 3.5 toneladas, en Tamaulipas es de 13.0 toneladas o sea, casi 10 toneladas de diferencia, en siembra de maíz blanco nacional.
La cultura nuestra nos hace depender de la masa y tortilla, pero el maíz tiene otros múltiples usos, como alimentos chatarra, los aceites, el alimento para ganado, almidones, entre otros. Y la producción del país ya no alcanza para la alimentación nacional que demanda toda la población.
“México, somos el principal importador de maíz de los Estados Unidos”. Y estos productos son mezclados y todos los comemos o sea, “no son auténticos”. A pesar de algunos estudios se puede decir que en la actualidad “no hay una confirmación que el maíz genéticamente alterado produzca un daño a la salud”, aunque la discusión parece que continuará en este sentido.
Es dañino el uso de los herbicidas químicos, que el producto conserva y, cuando se consume mucho se concentra y puede llegar a producir enfermedades, y justamente este es uno de los temas que el sector salud tiene en la mesa de la discusión junto con otros sectores del gobierno, –la Secretaría de Economía en especial–, asunto incluso obligado en el T-MEC.
“En cuanto a la producción estatal ha venido a menos, pero no ahora, ya en tiempos de nuestro Gobernador Agustín Acosta Lagunes (1980-1986), habló y propuso sembrar las orillas de las carreteras, porque ya era notoria la disminución de la producción y muy pocos le hicieron caso”. De ahí, el slogan: “Veracruz, granero y yunque de la Nación”. El economista y político no andaba errado en sus pronósticos, y quien siempre conto con un staff de asesores de prestigioo.
La producción va de la mano con el valor del producto y, a quien venderlo, pero ya no hay almacenes de depósito, como lo fue Almacenes Nacionales de Depósito S.A (ANDSA) y quien adquiría el maíz y operaba a través de la CONASUPO y DICONSA en tiempos de don Ignacio Ovalle Fernández, hombre cercano al Presidente Andrés Manuel López Obrador desde aquellos tiempos por los programas sociales vinculados al Instituto Nacional Indigenista (INI).
El aumento en el precio del maíz en el concierto internacional del comercio, eso también afectó a México, pues el maíz no sólo se utiliza para la tortilla, también para la alimentación directa de personas, de todos, como alimento básico, sino también para alimento de aves, de porcinos, de ganado, caprino y otros, y luego entonces eso es también lo que está ocasionando un desajuste en el precio y el abasto, problema que pudiera crecer.
El kilo de la tortilla en algunos sitios de México aumentó al rededor del 30% a tasa anual, esto tan sólo a finales de abril de 2023 y se espera siga subiendo debido al encarecimiento de insumos como la harina, el papel, combustibles, gas, transporte y peajes no sólo en alguna ciudad de México o región, sino en todo el país.
Los factores que explican -no que justifiquen- la constante alza del precio de este alimento, a decir de expertos en economía política y de conflictos bélicos, tienen que ver con la guerra entre Rusia y Ucrania, pues son países de los principales productores del grano de maíz; el incremento del costo energético en servicios fundamentales para su producción (gas natural y energía eléctrica), también encarecen este vital alimento en México.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
El problema por la falta de certeza para la comercialización de maíz, trigo y arroz por el precio y las cantidades respectivas en Sinaloa que provocó manifestaciones y bloqueos que incluyo protestas en el aeropuerto de Culiacán, Sinaloa, ojalá no se extienda a otros puntos del país. La posición de Seguridad Alimentaria Mexicana (SEGALMEX) para fijar precio a los agricultores es muestra de que no se deben descuidar otros frentes como la producción de azúcar (zafra 2022-2023) y que presentó una baja importante en los 18 ingenios de Veracruz.
DE SOBREMESA
La cultura de las movilizaciones, marchas y plantones como expresión social en México, ahora con los bloqueos en un aeropuerto y vías de comunicación, ojalá no lleven al abandono de las mesas de diálogo para los acuerdos de la mejor manera posible para que lo comercial y el sector productivo en su conjunto no les lleva a la arena de la politización de temas alimentarios para la población.
UN CAFÉ PARA LLEVAR
Los problemas del campo mexicano ocuparán un espacio relevante en la agenda de la Secretaría de Gobernación y de otros actores del Gobierno Federal vinculados con los Gobiernos estatales para evitar trastornos sociales innecesarios en la etapa de discusión política y electoral en el País. ¿O no?
UN LECHERO LIGHT DIVORCIADO
El llamado de un gobernador como el de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, a que los productores de maíz tomaran las bodegas de las empresas Gruma, Cargill y Minsa, e incluso ofreciéndose encabezarlos, no parece una acción correcta de un titular del Poder Ejecutivo, pues todo servidor público debe ofrecerse para ser facilitador en la solución a los problemas.
UN CAFÉ PARA LLEVAR
En los momentos de más alta tensión para los hombres y mujeres que están al frente de las instituciones, la frialdad con prudencia les ayuda más para que las decisiones no vayan a resultar peores, pues podrían llevar a constituir delitos más serios al incitar a la alteración del orden público y la paz.
UN CAFÉ NEGRO VERACRUZANO
Los bloqueos en aeropuertos y toda vía de comunicación no sólo provocan atrasos en los usuarios sino que producen grandes y graves pérdidas a la economía más allá de a quienes directamente les incumbe o sea, a todos.
¡ ES CUANTO !