Al estilo Mathey
Buen día apreciado lector:
A más de la mitad del sexenio del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, a diferencia de otros, si hay un servidor público que llame la atención, para bien, ese se llama Guillermo Fernández Sánchez.
El titular de la Sedesol veracruzana, como es debido, carga a cuestas la responsabilidad que desde el principio le encomendó el gobernador y así es como se ha venido desempeñando. está dedicado a lo suyo.
no anda con distracciones, nada lo entretiene ni busca otra posición política.
En el actual sexenio, es fácil notar en qué secretarías de este gabinete existen avances significativos y una de esas dependencias es la que bien dirige Fernández Sánchez, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Quienes tienen acceso a las plataformas digitales, a los periódicos y a la radio o televisión, tal vez no se den cuenta de la forma como en el estado se ha combatido la pobreza; pero los que sí lo hacen y están muy contentos y felices son los habitantes de las sierras, esas alejadas comunidades que se localizan en los cuatro puntos cardinales de la entidad veracruzana.
Por eso da gusto saber que hay funcionarios públicos que, -según información que consta al reportero- los números, la regla, los planos y la ropa de trabajo son la indumentaria que Don Guillermo luce a diario.
La gente se da cuenta que personalmente supervisa la calidad de las obras que les edifica, los materiales de construcción, las instalaciones de electrificación, la dimensión de esos cuartos dormitorio, pisos y techos firmes que son su objetivo diario.
Para él, más que poses y discursos, son las obras y acciones que tiene que cumplir de acuerdo al calendario de actividades que le han sido encomendadas, las que harán quedar bien a su jefe supremo.
Ingeniero de profesión, con amplia experiencia en el campo, enfrenta el trabajo acompañado de sus colaboradores que le tienen que llevar el paso, para cubrir la agenda de trabajo que se traza con anticipación y desarrolla en uno o dos días, en los cuales visita hasta cinco municipios.
La visión técnica con que realiza esas supervisiones le permite observar dónde se puede presentar alguna deficiencia y con respeto, pero enérgico se dirige al ingeniero residente, al maestro de obra y solicita la explicación correspondiente para aceptar o para que corrijan lo que a su criterio no cumple con la calidad que espera.
La sensibilidad se refleja en su rostro cuando visita las exposiciones de mujeres y hombres artesanos, quienes con los apoyos que otorga la Sedesol, inician proyectos productivos y logran alcanzar la producción que se proponen como el pan artesanal, la costura, el bordado, la repostería, la crianza de aves de corral, la crianza de cerdos y ver como esas familias de aquellas apartadas comunidades, van mejorando sus ingresos con micro y pequeñas empresas.
Uno de los proyectos más recientes que puso en práctica, es la instalación de purificadoras de agua para atender demandas entre las familias de escasos recursos, que son administradas por sociedades cooperativas de 40 personas y de esa forma lograr buenos ingresos.
La sensibilidad humana de Guillermo Fernández Sánchez se ha visto cuando se reúne con sus colaboradores en reuniones significativas, como el Día de las Madres, el Día del Padre, la reunión de Fin de Año y ahí es cuando de manera sencilla organiza encuentros, que le permiten acercamiento con sus compañeros.
Por lo mismo presento la semblanza de uno de los colaboradores del gobernador García Jiménez que con su sencillez demuestra la importancia del respeto y alto sentido de responsabilidad que debieran tener todos los servidores públicos,
Tenga paz y armonía en su hogar. Cuide por favor el agua y las plantas. Vea dónde se estaciona bien, de lo contrario sufrirá asalto legal con “la tránsita” de la grúa.
