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Bobo Limpio

Por Luis Humberto Muñoz Vazquez

Panoramas de Reflexión

            Recuerdo cuando apenas era un niño, en mi casa, a partir de mediados del verano, acostumbrábamos comer bobo limpio, como le decía mi madre. Había en ese entonces un señor a quien yo sólo conocí como el Güero, y que seguido pasaba a la casa por las noches con sendas sartas de bobo en una mano y un arpón y un visor en la otra, ataviado con un mugroso y roído morral de asa larga colgado al cuello, que atravesaba en diagonal por su pecho para terminar a un costado de uno de sus brazos. Mi mamá siempre le compraba, pues era una delicia sentarse a la mesa y disfrutar de un rico caldo de bobo, guisado a la manera ranchera o casera. Ésta consistía en lavarlo y desescamarlo, para luego cocerlo en agua limpia, agregando rebanadas de jitomate, cebolla y chile verde, o chiltepín verde entero, para después cuando estaba a punto de hervir soltarle una rama de epazote.

            En verdad, era una delicia, además creo su precio no era tan caro, pues en casa se comía seguido. El bobo, joturo o morón, es la especie Joturus pichardi, la única del género Joturus, un pez marino y de río de la familia de los mugílidos, como la liza, distribuido por todo el mar Caribe y el Golfo de México, desde Florida a Venezuela y desde Panamá a México. Es pescado solamente como modo de subsistencia en zonas restringidas donde tiene una gran importancia como fuente de alimento, pero en general, es poco comercializado y con un bajo valor en el mercado. La longitud máxima normalmente es de unos 25 cm, aunque se ha descrito una captura de 61 cm., pero ésta tal vez sea de la variedad del bobo jonote, tal como la conocemos aquí, un pez parecido al bobo, pero con una elevada cantidad de espinas, que dificulta su ingesta y demerita su sabor. Con la forma típica de los mugílidos, el bobo se distingue por su hocico redondeado. Es una especie que vive en el mar, cerca de la superficie del agua en ambiente nerítico-pelágico; es decir, entre cercano a la costa y la columna de agua del mar que no está sobre la plataforma continental; presenta un comportamiento catádromo (vive en los ríos y se reproduce en el mar), penetrando en los estuarios o desembocaduras de los ríos al mar y en lagunas costeras para reproducirse desovando allí, pudiendo subir por los ríos hasta aguas dulces y soportar bien las aguas salobres. Es herbívoro y se alimenta ramoneando algas de las rocas y del fondo con sus labios especializados para ello, aunque ocasionalmente come también crustáceos. Esto dificulta su pesca, por lo que aquí en el pueblo se pescaba con arpón. Qué tiempos aquellos. Ahora el río está a punto de morir, lo hemos descuidado enormemente y parece que no hay iniciativas serias y sólidas para su recuperación y conservación. Nos falta mucha educación ambiental e información al respecto. Es una pena, pero los dragados podrían no funcionar.

            Tal vez, sembrar bambúes en las márgenes del río ayude un poco a largo plazo, como me lo comentaba un buen amigo, el bambú podría cumplir, en las riberas del río, como una defensa contra las erosiones ribereñas y mitigando efectos de deslizamientos y otros desastres naturales, el problema es que quién lo podaría constantemente para que no creciera tan alto. El bambú ya se conoce en otras partes del mundo como “El nuevo acero vegetal”. La capacidad del bambú para resistir el embate de aguas torrentosas, por el crecimiento vertical y horizontal de sus raíces, que forman una vigorosa maraña que consolida el suelo y subsuelo, tiene que ser mejor aprovechada. “Ya es hora de generalizar el uso del bambú en la defensa ribereña, especialmente en zonas donde en época de lluvias, ocurren desbordes y deslizamientos”. Actualmente el bambú se desarrolla de modo silvestre en numerosas regiones y pisos ecológicos del país; sin embargo, sería bueno pensar en aprovechar ya su utilidad, y tal vez las nuevas generaciones, sus hijos y sus nietos, puedan vivir lo que nosotros disfrutamos alguna vez, y conocer el delicioso sabor del bobo. ¿No lo cree usted así amigo lector? Piénselo un poco. Que tenga un buen día.

Luis Humberto.

Integrante de la Red Veracruzana de Comunicadores Independientes, A. C. (REVECO).