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El año del gato

Por José Antonio Medina Aguilar

PIENSO, LUEGO ESCRIBO

Por Akiles Boy*

Escribí hace algunos años un pequeño artículo, con referencias del filme mexicano  “Rosa Blanca”. Fue durante un extraño día, en la programación de la televisión me encontré con esa película. La cinta dirigida por Roberto Gavaldón, con guion de Emilio Carballido, Phil Stevenson y quien la dirigió, sus protagonistas fueron Rita Macedo e Ignacio López Tarso, se basó en la novela “La Rosa Blanca” (1929) del escritor alemán Bruno Traven y narra la dramática historia de un campesino mexicano, dueño de una hacienda situada en el norte de Veracruz, zona en la que se habían instalado, mediante concesiones del Gobierno, compañías petroleras inglesas y norteamericanas.

Resulta, que en las tierras de Jacinto Yañez, personaje principal de la novela y en la película, descubren yacimientos de petróleo que despiertan la codicia y voracidad de la Transnacional Cóndor Oil Company. Primero intentan comprarle, pero al obtener una negativa del agricultor mexicano, activan  un perverso plan de seducción y asesinato. Al final se apropian de la hacienda, utilizando la maquinación y represión, con el beneplácito de las autoridades locales.

Retrata B. Traven con gran realismo, una etapa violenta del México contemporáneo, caracterizada por los abusos y explotación de los trabajadores, por las Compañías Petroleras extranjeras en la región de la Huasteca, antes de la Expropiación Petrolera de 1938. Po cierto, la cinta grabada en 1961, fue censurada y su estreno se realizó hasta 1972.       

Recupere el tema, porque en primer lugar, continúa el debate relativo a la reforma energética y la viabilidad de la paraestatal Petróleos Méxicanos PEMEX, después de desastrosas administraciones. El actual Gobierno Federal decidió cancelarla, mientras la oposición cuestiona ahora la prioridad del uso de energías contaminantes. Por otro lado, en estos días  esa zona del norte de Veracruz, fue azotada por el huracán Grace, dejando graves daños a sus habitantes y a la infraestructura. La situación, me hizo recordar mi corta estancia de estudiante en Poza Rica, ciudad que durante el auge petrolero tuvo una gran época de crecimiento y bonanza. En los años setentas era el polo de atracción de esa región.

A mediados de 1977, emprendí el vuelo de mi pueblo, colindante con el Estado de Tamaulipas, y aterrice en Poza Rica, una ciudad dinámica, próspera, hospitalaria y con creciente presencia en el contexto nacional. La industria petrolera todavía le inyectaba vida y movimiento. Se observaba un atractivo mercado, con grandes almacenes y un floreciente comercio, que era uno de los símbolos de su fortaleza y esperanza para el futuro. La Universidad Veracruzana estableció un campus y eso le daría más valor.

En Poza Rica, la ciudad que creció al amparo de la industria petrolera nacional, y con benevolencia dio cobijo a migrantes que buscaban mejorar sus condiciones de vida, inicie los estudios universitarios y fue como el centro de concentración, donde en un curso intensivo, me ayudaron a estar listo para las batallas que venían. Tuve la fortuna de encontrar en la Universidad, en la calle y en los sitios donde estuve alojado, a seres humanos entrañables, empáticos y solidarios, que siempre estarán en mis recuerdos. Para finalizar, en discordancia con el contenido, el título del texto “El año del Gato” (“Year of the Cat”) es el nombre del sencillo y el álbum del cantante y compositor inglés Al Stewart, producido en 1976 por Alan Parsons. El tema lo escuche y compre el disco en Almacenes Apolo, era mi primer día en la primera ciudad que me adoptó. Lo puse en la consola de un amigo, estando de regreso en mi pueblo un fin de mes. Hasta la próxima. 

Septiembre 2 de 2021

*Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores Independientes, A.C.