A través de un comunicado el Departamento de Seguridad de Estados Unidos aclaró que es un imperativo moral y de salud pública garantizar que todos los individuos que habitan en este país tengan acceso a la vacuna contra la Covid-19, independientemente de su condición migratoria. En ese sentido, el comunicado invita a los indocumentados a acercarse a los centros de distribución de la vacuna de acuerdo a los criterios aplicados en la localidad donde radiquen, comprometiéndose a no hacer redadas cerca de los sitios de vacunación.